Maracena
El marido de la concejal secuestrada dice que su mujer temía represalias y que el secuestrador hizo dos llamadas
El Ayuntamiento de Maracena ha celebrado hoy un pleno extraordinario por este asunto. Durante la sesión el marido de la concejal secuestrada ha asegurado que su mujer temía que le pasara algo
Publicidad
El Ayuntamiento de Maracena ha celebrado hoy un pleno extraordinario para abordar el secuestro que sufrió el pasado martes la concejal Vanessa Romero, unos hechos por los que fue detenido la ex pareja de la alcaldesa del municipio, Berta Linares.
Durante la sesión Linares ha condenado "rotundamente" lo que le ha ocurrido a su compañera y ha reconocido que, tras la muerte de su padre, está pasando "los peores días" de su vida. Además, ha confirmado que su ex pareja se había empadronado en Maracena, en su domicilio, a pesar de que ella en un primer momento declaró que residía en Málaga.
De la misma forma, ha mostrado su disposición y la del consistorio a colaborar con la Justicia con la entrega de expedientes desde 2007 con la mayor "transparencia".
No obstante, tras sus palabras los grupos municipales le han pedido que dimita "hasta que se aclare todo".
Vanessa temía represalias
En el pleno también ha estado presente el marido de la concejal secuestrada. Pocos minutos antes de concluir la sesión ha abandonado la sala para atender a los medios durante unos minutos. Aunque el caso está bajo secreto de sumario, el hombre ha confesado que su mujer temía represalias. "No sabía si decir algo de papeles o irregularidades porque temía algo. La víctima es mi mujer, y la que estaba en el maletero del coche y la iban a matar era mi mujer. Quiero que el que está en la cárcel pague muchos años y si hay alguien más implicado, también", ha pedido.
El marido también ha asegurado que el secuestrador realizó dos llamadas durante el trayecto. "Nombraba a dos personas, a su pareja y a otra persona más, y que hizo dos llamadas. Ella no escuchó nada, dice que cuando estaba encerrada le gritó que se callara porque estaba pataleando y le dijo que se callara que tenía que hacer dos llamadas y lo escuchó murmurar", ha descrito.
Publicidad