El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha comparecido en rueda de prensa tras el hallazgo del cuerpo del pequeño Julen, el niño que se cayó a un pozo de Totalán el pasado 13 de enero.
Durante su comparecencia, Grande-Marlaska ha agradecido en su nombre y en nombre del Gobierno de España su pesar, apoyo y solidaridad con la familia de Julen, especialmente con sus padres.
"Es obvio que es muy difícil imaginar el dolor y desgarro que la pérdida de un hijo puede causar y es difícil pensar en la angustia que han pasado durante estos 13 días", indicaba el ministro del Interior, que incidía en el hecho de que "durante muchas horas toda España ha tenido la esperanza de encontrar a Julen con vida".
Marlaska recuerda que desde el pasado 13 de enero se ha hecho una labor de "ingeniería humanitaria en la que han participado cientos de personas y donde todas las instituciones han colaborado y se han coordinado perfectamente".
El ministro del Interior ha querido subrayar la solidaridad que ha reinado en el ambiente durante estos 13 días y considera que "el tremendo dolor de la muerte de Julen solo lo puede paliar la solidaridad y la determinación con la que tantas personas han intervenido en una operación de rescate enormemente compleja desde un punto de vista técnico".
Indica que siente profundo orgullo y agradecimiento por la solidaridad recibida y reconoce el trabajo realizado por Ángel García Vidal y Antonio Nieto.
"Como ministro del Interior es un orgullo y quiero agradecer el extraordinario trabajo desarrollado por la Guardia Civil, que ha coordinado en las labores de rescate", dice Marlaska, que subraya que "se ha hecho todo lo posible para salvar a Julen".
"Desgraciadamente no hemos podido rescatarlo con vida, pero el trabajo incansable de la Guardia Civil no ha terminado: ahora resta la investigación para determinar las circunstancias en las que se ha producido este trágico suceso", explica el ministro, que pide que se deje trabajar a los expertos con la misma coordinación que hasta ahora y que se siga arropando a la familia del niño.
