Volcán de La Palma
Más de 1.000 vecinos de La Palma llevan fuera de sus casas más de un año por los gases del volcán
Los gases del volcán han estado presente en estos dos pueblos que no se vieron afectados por las coladas y, en algunos casos, no han podido entrar ni siquiera a retirar enseres.
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Los vecinos de Puerto Naos y La Bombilla, dos pueblos de la costa oeste de la isla de La Palma, llevan fuera de sus casas desde hace más de un año: salieron el mismo día de la erupción del volcán, el 19 de septiembre de 2021. Sin embargo, sus viviendas están en pie, no fueron arrasadas por las coladas de lava, el problema son los gases tóxicos que aún se registran en estas zonas.
Muchos de estos vecinos siguen alojados en hoteles y en casas de familiares. Ahora, más de un año después, el Gobierno de Canarias está planificando ya la construcción de al menos 160 viviendas en La Palma para atender a estas familias desalojadas de una de las zonas más turísticas de la isla.
“Lo que era un problema provisional, el desalojo temporal por los gases tóxicos, ha acabado convirtiéndose en un problema estructural al ser imposible fijar una fecha aproximada para la vuelta, ya que la presencia de gases sigue siendo intensa”, ha dicho el consejero de Obras Públicas, Transportes y Viviendas, Sebastián Franquis. La Consejería ha acordado con el Gobierno central la creación de este nuevo Plan, para el que se van a aportar 12 millones, como ya reflejan los proyectos de los presupuestos del próximo año tanto de la comunidad como del Estado.
Los vecinos consideran que estas medidas llegan demasiado tarde. Desde que finalizara la erupción, los gases del volcán han estado presente en estos dos pueblos que no se vieron afectados por las coladas. Llevan más de un año fuera de sus viviendas y, en algunos casos, no han podido entrar ni siquiera a retirar enseres porque las concentraciones de CO2 son incompatibles con la vida. Ellos dicen que tienen los recursos para hacer las mediciones de gas y podían ir entrando asesoraos por los científicos.
De hecho, una veintena de estos vecinos se han saltado la prohibición y han dormido en sus casas durante algún finde de semana. Equipados con medidores de gases adquiridos por cuenta propia, los vecinos se han concentrado en los accesos a los núcleos y han entrado a sus viviendas para hacer labores de mantenimiento. La Guardia Civil ha confirmado que se está denunciando a las personas que entraron a estas zonas de acceso restringido, a las que solo se puede entrar con permiso y acompañamiento y por un tiempo limitado, sin pernoctar en ningún caso.
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