Sucesos
La desesperación de la madre de Daniel, el bebé desaparecido junto a su abuelo: "Su cerebro no responde"
La desesperación de la madre de Daniel, el bebé que desapareció con su abuelo, es más grande a cada instante. Estas 24 horas son cruciales para determinar su estado de salud.
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El bebé de 22 meses que desapareció junto a su abuelo continúa en estado grave, aunque estable. Por lo visto, el pequeño no vivía con sus padres, sino con sus abuelos en una localidad cercana. La desesperación de la madre aumenta a medida que pasan las horas, quienes son cruciales para determinar cómo evolucionará la salud de Daniel: "Su cerebro no responde, estamos a la espera".
La madre ha confirmado que "no le van a operar porque no resistiría". Tras encontrar al abuelo y al bebé desaparecidos, el menor tuvo que ser trasladado en un helicóptero medicalizado al Hospital Virgen del Rocío de Sevilla. Por el contrario, el anciano, quien al parecer tenía problemas psicológicos, falleció instantes después. Durante el día de hoy, se espera conocer el resultado de la autopsia del cuerpo del abuelo, la que podrá determinar si el fallecimiento fue por suicidio.
La gravedad del bebé pudo producirse a causa de "la falta de oxígeno prolongada" que vivió el pequeño, quien está ingresado en la UCI. Se sabe que el menor presentaba hipotermina, deshidratación y falta de oxígeno severa.
¿Qué se sospecha?
Los familiares no creen que el abuelo quisiera hacerle daño al menor. Simplemente, todo apunta a que el abuelo no estaba en las mejores condiciones para hacerse cargo del bebé. Por lo visto, el anciano tenía problemas psicológicos y algunas fuentes apuntan que sufría fuertes dolores por una intervención que le había impedido trabajar.
El abuelo también podría haber dejado una carta, aunque por el momento tan solo es una sospecha. En el caso de la existencia de tal misiva la tendría la mujer del fallecido, la abuela del menor. Por otro lado, la madre del bebé tacha de "secuestro" el acontecimiento porque, además, trataron de ocultarle la desaparición de su propio hijo.
A pesar del estado crítico de Daniel, la esperanza por su recuperación sigue viva.
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