¿Un minuto dura lo mismo para un niño que para un adulto? Esta es la percepción que unos y otros tienen del tiempo

¿Falta mucho para llegar? ¿Cuántos días quedan para mi cumple? ¿Cuándo acabas de trabajar mamá? Seguro que quienes tienen hijos pequeños están familiarizados con estas preguntas y es que para los niños la percepción del tiempo no es la misma que para los adultos.

Investigadores de la Universidad Eötvös Loránd en Hungría han querido buscar respuesta a por qué y cómo entendemos el tiempo en función de nuestros años y para ello se establecieron 3 franjas de edad de 4 a 5, de 9 a 10 y de 18 años en adelante. La pregunta de partida era cómo afecta la agitación a nuestras estimaciones de la duración al sondear distintos hitos de nuestro desarrollo cognitivo.

A cada grupo se le hizo ver dos vídeos de dibujos animados de 1 minuto cada uno. en uno de los vídeos se mostraba una rápida sucesión de acontecimientos y en otro una secuencia monótona y repetitiva. Después de ver ambos vídeos, sólo hicieron dos preguntas: "¿Cuál era más largo?" y "¿Puedes mostrar las duraciones con los brazos?".

Los resultados mostraron un fuerte sesgo en cada grupo de edad, pero en el caso de los niños de preescolar, sorprendentemente, en la dirección opuesta. Para los más pequeños la respuesta mayoritaria fue que el vídeo lleno de acontecimientos era más largo mientras que tres cuartas partes del grupo de adultos opinaban lo mismo del vídeo sin acontecimientos. El grupo intermedio expresó un sesgo similar pero más moderado que el adulto.

Precisamente este grupo intermedio permitió a los investigadores establecer el punto de inflexión en torno a los 7 años. En cuanto a la orientación de los brazos y la distancia, se observó una tendencia creciente a utilizar la extensión horizontal de los brazos con la edad.

Los modelos biológicos de percepción del tiempo se dividen en dos categorías: las neuronas cerebrales con marcapasos y las neuronas que muestran una frecuencia de disparo decreciente con el tiempo.

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