Los Mossos d'Esquadra han detenido a cuatro personas en una operación que ha permitido desmantelar dos 'narcopisos' situados en el barrio barcelonés del Poble Sec, donde se asentaron algunos de los detenidos que quedaron en libertad tras el primer golpe policial a los narcopisos del Raval.
Según han informado los Mossos, los detenidos son supuestamente narcotraficantes que habrían dejado Ciutat Vella por la presión policial en este distrito contra los narcopisos, y que culminó el pasado 29 de octubre en la operación Bacar, en la que se registraron y clausuraron una treintena de estos puntos de venta de droga y se detuvo a 58 personas en el barrio del Raval.
La investigación, que ha sido coordinada por el Juzgado de Instrucción número 27, ha permitido demostrar que varios detenidos en la operación Bacar que quedaron en libertad se reubicaron en los narcopisos que han sido desmantelados hoy en el Poble Sec. A pesar de este cambio de localización, han explicado fuentes policiales, los narcotraficantes mantenían su actividad delictiva y seguían suministrando "todo tipo" de sustancias estupefacientes a los toxicómanos del Raval.
Esta nueva investigación de los Mossos comenzó a principios del mes de noviembre, cuando los vecinos y comerciantes del barrio de Poble Sec informaron sobre la presencia de toxicómanos que entraban y salían de diversos pisos, muy cercanos a la zona del Raval donde tuvo lugar la operación Bacar.
La policía, después de corroborar los hechos con un dispositivo de paisano y comprobar que se había triplicado la venta de jeringuillas en farmacias, descubrió dos pisos muy frecuentados dónde se estaba consumiendo y distribuyendo droga de forma habitual.
Los agentes de los Mossos han encontrado esta mañana a 24 personas, que ya han sido identificadas, en el interior de uno de los narcopisos. Después de desmantelar los puntos de venta de droga en estas viviendas, que se encontraban ocupadas, una ha sido devuelta a su legítimo propietario y la otra ha quedado precintada por orden judicial.
