En un comunicado, el movimiento okupa califica de "brutal" la acción de los mossos que anoche actuaron en el barrio de Sants para dispersar una manifestación en contra del desalojo y posterior derribo de Can Vies.
Según el balance de este movimiento, resultaron heridas una decena de personas, entre ellas dos jóvenes por balas de goma, dos detenidas y 17 identificadas. Fuentes de los Mossos d'Esquadra han informado de que uno de los detenidos pasará mañana a disposición del juez al ser una persona extranjera y no tener domicilio conocido, mientras el otro ha sido puesto en libertad con cargos al tener domicilio.
Los okupas denuncian, además, que un grupo de mossos persiguieron a varios periodistas que cubrían la protesta cuando intentaban refugiarse en la sede del semanario La Directa, en la calle Riego, donde una furgoneta de la Brigada Móvil de los mossos, cuyo número de identificación aseguran tener documentado, "intentó entrar, romper un vidrio y causó diversos heridos graves".
En este sentido, el Sindicato de Periodistas de Cataluña/Sindicato de Profesionales de la Comunicación (SPC) ha denunciado hoy los ataques de que fueron objeto ayer los periodistas que cubrían el desalojo del centro social de Can Vies, "tanto por parte de grupos de encapuchados que protestaban contra la decisión municipal como por parte de los agentes antidisturbios de los Mossos d'Esquadra".
El SPC dice que un grupo de agentes intentó entrar en la sede de La Directa y que algunos informadores que acudieron al lugar "fueron golpeados por diversos antidisturbios, mostrando especial ensañamiento con una compañera de Radio Barcelona". Además, se solidariza con la sección sindical del SPC de TV3 en relación a la acción de que fue objeto la unidad móvil de esta emisora, que resultó prácticamente destruida por las llamas en el transcurso de la protesta de Can Vies.
El movimiento okupa ha responsabilizado a TMB (empresa de transportes de Barcelona propietaria del inmueble), al alcalde de Barcelona, Xavier Trias, y al concejal Jordi Martí del desalojo del edificio de Can Vies, en el barrio de Sants de Barcelona, y los posteriores incidentes que se saldaron con dos detenidos y una docena heridas de diversa consideración.
