Picadura avispa
Muere en León un guardia civil por la picadura de una avispa mientras trabajaba en el campo
Intentó administrarse el antídoto, pero ya era demasiado tarde o apenas tuvo los efectos deseados.
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Un agente de la Guardia Civil ha fallecido por la picadura de una avispa mientras realizaba unas labores de mantenimiento en sus viñedos de Villaquejida, León.
El hombre, de 53 años, se trasladó este miércoles por la tarde a su finca con la idea de desbrozar unos terrenos en donde tenía plantaciones de viñedos. Allí sufrió la picadura que terminó con su vida, tal y como avanzan las fuentes de la Subdelegación del Gobierno.
El agente era alérgico a la picadura de las avispas, por lo que fue provisto de la medicación correspondiente para prevenir sus graves consecuencias en el organismo. Una vez el insecto inyectó su veneno, el hombre se administró supuestamente el antídoto aunque o bien ya era demasiado tarde o bien no tuvo los efectos deseados.
Tras no regresar a su casa y no responder a las llamadas telefónicas, sus familiares se trasladaron a la finca en la que hallaron su cadáver sobre las 2:00 horas de la madrugada del jueves. Ya por la mañana, los médicos certificaron su fallecimiento y se procedió al levantamiento del cuerpo.
Este guardia civil había sido destinado a prestar servicio en un cuartel cercano a la ciudad zamorana de Benavente. En su pueblo, Villaquejida, pasaba largas temporadas de vacaciones y fines de semana. Allí era muy querido. Los vecinos de ambas localidades no dan crédito y les cuesta asimilar su fallecimiento. Este viernes, tendrá lugar el funeral en su municipio natal.
Alerta por el aumento de los avispones asiáticos durante el verano
En el Reino Unido ya se han empezado a activar alarmas ante la alerta de un posible aumento considerable de avispones asiáticos peligrosos. Nicola Spence, directora de sanidad vegetal del Departamento de Medio Ambiente, Alimentación y Asuntos Rurales del gobierno, aseguró hace unos meses que el pasado año ya hubo un aumento notorio de avisos de avispones asiáticos. Los alérgicos a las picaduras de avispas son la principal población en riesgo por la especie, aunque también amenaza a las especies autóctonas.
El gobierno británico ha facilitado una dirección de correo electrónico para que cualquier persona comunique el avistamiento de este tipo de insectos. Recomiendan fotografiar a la especie y comprobar que se trata efectivamente de un avispón asiático para enviarla posteriormente a alertonnative@ceh.ac.uk.
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