Alicante
Muere un matrimonio octogenario en la playa en Alicante: él de un infarto y ella al socorrerle
El hombre de 87 años sufrió un infarto y su mujer de 85 años fue a intentar socorrerle.
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Trágico suceso en Guardamar del Segura, en Alicante. Una matrimonio octogenario ha muerto en una de las playas de la localidad. El hombre de 87 años sufrió un infarto y su mujer de 85 años fue a intentar socorrerle. La mujer entró en parada respiratoria por el estado de 'shock'.
Ha ocurrido este jueves sobre las 10:30 horas en la playa urbana Centro, según fuentes sanitarias y municipales a EFE. La mujer se dio cuenta de lo que estaba ocurriendo en el agua -con bandera verde- y acudió de inmediato a socorrer a su marido.
El marido sufrió un infarto y se quedó flotando en el agua. Al ver que el hombre no respondía, la mujer entró en 'shock'. Ambos fueron asistidos por los servicios de socorrismo de Cruz Roja y posteriormente por una ambulancia del SAMU y del Soporte Vital Básico.
Las maniobras de reanimación RCP no dieron resultado porque ambos ya habían fallecido, según el Centro de Información y Coordinación de Urgencias de la Generalitat (CICU).
Cinco muertos en las playas de Guardamar del Segura
Desde el comienzo de la temporada de baños, un total de cinco personas han muerto en las playas de Guardamar del Segura. El pasado 7 de junio murieron ahogados un hombre de 46 años y otro de 52 en La Roqueta al entrar al mar para ayudar a un grupo de bañistas que no podía salir por la fuerte corriente.
El 6 de junio otro hombre de 68 años también falleció en la misma playa. Las playas de Guardamar del Segura son especialmente peligrosas los días de levante por ser muy abiertas y formarse sin previo aviso unas corrientes hacia el interior en varios de sus puntos, lo que en la población se conoce como 'canales', que dificultan sobremanera el regreso a la arena.
Más de 400 víctimas anuales
En España el ahogamiento se sitúa entre las tres primeras causas de muerte no intencional. El 80% de los ahogamientos se producen en los principales meses de verano y, por tanto, de ocio acuático: junio, julio, agosto y septiembre. En estos cuatros meses se estima que el ahogamiento mortal causa más de 400 víctimas anuales. Las asistencias a personas por ahogamiento ascienden a un baremo entre 1.200 y 2.000 al año.
Roberto Barcala, coordinador del Grupo de Socorrismo de de la Sociedad Española de Medicina de Urgencias y Emergencias (SEMES) ha explicado que el ahogamiento es prevenible, pero "es necesario informar a los usuarios de los riesgos y desmitificar las falsas creencias entorno a los incidentes acuáticos". Las principales edades de ahogamiento son la niñez y la adolescencia, siendo más común que los primeros se ahoguen en piscinas particulares por falta de supervisión y los segundos en entornos naturales.
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