La mujer de Luis Lorenzo no acompañó a su tía tras sufrir un ictus porque "tenía que hacer deberes con el niño"

Hoy han salido a la luz nuevas informaciones sobre el caso de Luis Lorenzo y su mujer Arancha Palomino y su presunta implicación en la muerte de su tía Isabel. Según el sumario, al que ha tenido acceso Antena 3 Noticias, el día en el que el matrimonio fue detenido, Arancha intentó autolesionarse en el calabozo. Cuando la llevan al hospital, según se recoge en el atestado, ella le dijo a los agentes una frase reveladora: "Si llego a saber que pasa esto, hubiese incinerado a mi tía, así nadie se entera y nada de esto hubiese pasado".

La Guardia Civil también señala que, cinco días después de que la fallecida comenzara a vivir con ellos, la pareja tenía anotaciones sobre el dinero de la anciana. De hecho, su sobrina llegó a conseguir un poder notarial para manejar las cuentas de su tía y presentó una queja porque en la Caja Rural de Asturias no le permitieron acceder a sus depósitos a plazo fijo.

Arancha dejó a la mujer con su cuidadora

Además, cuatro semanas antes de morir, un medico de un centro de salud de Rivas-Vaciamadrid apreció signos de un posible ictus en la anciana. La mujer de 85 años había llegado al centro médico en silla de ruedas y sin poder hablar bien. El facultativo aconsejó entonces a la sobrina llamar al hospital para que enviaran una ambulancia, pero la respuesta fue que "le venía mal ya que tenía que hacer deberes con el niño". Por esa razón Isabel tuvo que esperar con su cuidadora.

Tras su muerte, la autopsia de Isabel Suárez reveló que había fallecido por envenenamiento por metales pesados. El matrimonio sigue defendiendo que no han hecho nada malo y el abogado, Francisco Pérez Platas, ha pedido que "se les respete la presunción de inocencia y que no se haga un juicio condenatorio". Por otro lado, la familia de la mujer fallecida ha recurrido la libertad de la pareja.

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