Polémica en Barcelona
Mujeres en ropa interior y amasando pan, el vídeo que se muestra en una panadería de Barcelona y que ha desatado la polémica
En el interior de la panadería se proyecta en bucle un vídeo promocional del negocio donde aparecen chicas bailando en tanga mientras enseñan la bollería del local.
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Varias mujeres bailando en ropa interior, jugando con la harina, extendiendo la masa con un rodillo y mostrando los productos que se pueden degustar en el local mientras bailan y se contonean en tanga. Estas son las imágenes que se pueden ver en el vídeo que se proyecta en el interior de la panadería Bakers, de Barcelona, durante todo el día. Unas imágenes que varias familias del barrio han denunciado "por inapropiadas y porque cosifican a la mujer".
Un grupo de niños de primaria alertó de las imágenes
Los primeros que se sorprendieron por esas imágenes fueron unos niños de primaria de una escuela cercana que avisaron a sus familias del contenido del vídeo. Berta Villaescusa, es una vecina del barrio y madre de un niño de 11 años, dice que "no daba crédito cuando lo vio".
Ese mismo día hablé con los responsables del local y "les pedí que quitaran el vídeo" y "respondieron que no" que eran "órdenes de arriba y que no lo iban a retirar". Berta explica que pidió el libro de reclamaciones y que se empezó a movilizar para ver qué podía hacer.
El dueño del local dice que "es libertad de expresión"
El dueño del local dice que "es libertad de expresión"El responsable de la panadería, Georgy Shirshov, ha enviado un comunicado en el que explica "que se siente sorprendido por la reacción de algunas personas" y que no entiende "por qué no gusta la publicidad de tartas con modelos de chicas en trajes de baño". Asegura que "está a favor de las chicas hermosas, de los productos de panadería de alta calidad y pide respeto a su libertad de expresión".
El Institut Catalán de la mujer lo está investigando
Las quejas ya han llegado al Institut Catalá de la Dona (ICD) que ya ha iniciado una investigación por "el alto contenido de cosificación de la mujer e incitación al porno", según nos explica Sonia Guerra, presidente de la entidad. En esas imágenes "se instrumentalizada a las mujeres". Ya se han puesto en contacto con el dueño del establecimiento para que lo retire sino lo hace podría iniciarse un proceso sancionador que podría acarrear “sanciones de entre 300 y 10.000 euros".
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