Polémica Onlyfans

Onlyfans: un espacio blanqueado del negocio del sexo

El Ministerio de Igualdad por la Federación de Mujeres Jóvenes realiza un informe sobre el uso de la plataforma de Onlyfans, la cual tachan de ser una nueva forma de explotación sexual.

Onlyfans

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Onlyfans es una conocida plataforma en la que los usuarios suben contenido de carácter sexual para sus suscriptores, aquellos que deciden pagar por verlo. El detalle más impactante es que más de 97% de cuerpos expuestos son de mujeres, frente a menos de un 3% que pertenecen a hombres, según las estadísticas de Hubite. Además, nos encontramos con que el perfil del usuario mayoritario es un hombre joven, entre los 25 y los 44 años.

La redactora del informe, Mónica Saiz, la vicepresidenta de la federación Raquel Pérez o Aina Calvo, la secretaria de Estado de Igualdad y contra la Violencia de Género fueron algunas de las participantes en la presentación de un análisis feminista de esta plataforma, que tachan de ser una nueva forma de explotación sexual.

Hablan sobre cómo cada vez atrae a más mujeres jóvenes y que no viven en las condiciones que se podrían imaginar: "Hay muchísimas mujeres jóvenes universitarias que no están en una situación de vulnerabilidad y están subiendo contenido de índole textual", comenta Mónica Saiz.

La intención del estudio es clara: Analizar las nuevas formas de explotación sexual que, desde la pandemia, se han comenzado a digitalizar y a desarrollar en lugares como Onlyfans.

Las ganancias de esta plataforma van incrementándose cada vez más, en concreto han aumentado un 47% sólo en el pasado año. Sin embargo, hablan de que las condiciones contractuales son abusivas para los usuarios de la plataforma. Aunque te des de baja de la plataforma no tienes ningún tipo de derecho sobre tus fotos, van a poder seguir siendo difundidas por la plataforma eternamente.

Y es que la famosa huella digital puede dejar secuelas psicológicas en muchas de las mujeres que ahora suben contenido de carácter sexual de manera inocente.

Muchas son jóvenes que son captadas de manera inocente para hacer porno amateur, y aunque ellas piensan que solo será subir un par de imágenes, finalmente entran en una estructura de proxenetismo. Sin embargo, desde fuera muchos no son conscientes de que aunque sea digital, por medio de un móvil y en sus casas, en muchas ocasiones lo que se está realizando es pornografía, y quienes están detrás "ayudándolas" no son más que proxenetas.

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