El detenido tras la muerte de un menor de edad que se encontraba en una embarcación en aguas de una playa de Algeciras (Cádiz) podría ser acusado como presunto autor de un delito de homicidio doloso o de homicidio imprudente, así como de un delito de blanqueo de capitales por la adquisición de la barca, según han indicado fuentes cercanas al caso.
Cabe recordar que la embarcación había sido recogida del Servicio Marítimo Provincial una hora antes del suceso por su propietario, previo pago de una sanción, tras haber sido investigada como una embarcación que podía prestar apoyo logístico al narcotráfico, ya que fue interceptada sin documentación y con garrafas de gasolina. No obstante, en el momento del siniestro no tenía implicación alguna con el narcotráfico.
El acusado se encuentra en dependencias judiciales prestando declaración en el Juzgado de Instrucción número 1 de Algeciras (Cádiz), por segundo día, tras haber decretado la juez una prórroga de 24 horas su detención para proceder a la práctica de distintas diligencias de investigación, llevada a cabo por la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta (UDEV) de la Policía Nacional de Algeciras.
Por su parte, el segundo detenido en el momento del siniestro, que iba como acompañante en la embarcación que causó los hechos y quedó en libertad con cargos a la espera del avance en la investigación pasará a calidad de testigo en la causa.
El patrón de la nave es Pedro Manuel, de 38 años, y tras el accidente dio positivo en el test de alcoholemia. Sin embargo, en el mar no es delito ir ebrio al volante.
La playa donde arroyó al niño es una zona de baño en la que no se puede pilotar a gran velocidad una lancha como la suya, una nave nodriza de siete metros y medio de eslora posiblemente destinada a surtir de gasolina a las potentes narcolanchas que transportan el hachís desde Marruecos hasta España.
Pedro Manuel tiene antecedentes por tráfico de drogas. El padre del menor fallecido también es conocido de la Policía por su vinculación al narcotráfico.
