Las pérdidas por los incendios de diciembre en Asturias ascienden a 12 millones de euros

La oleada de incendios que afectó a Asturias en la segunda quincena del mes de diciembre, un periodo en el que se registraron 364 focos de fuego, calcinó 12.207 hectáreas y provocó 12 millones de euros de pérdidas por la superficie arbolada quemada en Cangas del Narcea, El Franco, Boal, Tineo y Parres. Estos datos han sido facilitados por el consejero de Presidencia, Guillermo Martínez, durante su comparecencia ante la Parlamento regional para informar de los incendios registrados en este periodo, que ha calificado de "devastador" al superar "cualquier previsión que los expertos pudieran calcular".

La zona más castigada fue la comarca occidental, donde, pese a registrarse un número de incendios menor, la superficie total arrasada fue mayor fundamentalmente por el fuego iniciado en Brañavivel (El Franco), que se extendió a los concejos de Boal, Tapia de Casariego y Castropol y que afectó a 2.554 hectáreas. Dicho incendio se inició el 19 de diciembre y, pocas horas después, Asturias llegó a registrar un máximo de 147 focos activos simultáneos en una jornada en la que se produjeron 163 incendios contra los que lucharon un total de 350 personas.

La segunda fase de la oleada de incendios, agravada por las altas temperaturas, el fuerte viento sur y la ausencia de lluvias, comenzó el 28 de diciembre cuando se reactivaron los focos hasta alcanzar una cifra de 102 en cuya extinción participaron 530 efectivos.

Martínez, que ha tenido un recuerdo para el piloto José Antonio Rodríguez, fallecido el 23 de diciembre al estrellarse el helicóptero con el que trabajaban en la extinción de un incendio en Parres, ha asegurado que el Principado activó y coordinó todos los medios disponibles de las distintas administraciones para hacer frente a los fuegos y proteger a las personas y bienes privados. Tras recordar que la media de incendios en las últimas décadas en el mes de diciembre fue de 50 fuegos y 190 hectáreas calcinadas, ha señalado que el Gobierno regional intenta agilizar los trámites para hacer frente a las consecuencias de este "desastre medioambiental".

Así, ha pedido al Gobierno central la modificación del Real Decreto que regula sus ayudas para facilitar el acceso a los afectados, prevé habilitar las subvenciones incluidas en el Programa de Desarrollo Rural y está elaborando un decreto de subvenciones para apoyar a familias que perdieran sus primeras viviendas. Además, el Ejecutivo regional se ha puesto en contacto con los de Cantabria, Galicia y el País Vasco para establecer un cómputo global de los daños sufridos por la oleada de incendios que sufrieron y acogerse a las compensaciones económicas procedentes del Fondo de Solidaridad de la Comisión Europea.