Oficios desaparecidos
Pescador de anguilas: un oficio en peligro de extinción
Capturar este codiciado manjar es cada vez más difícil: falta especie y la normativa es cada vez más restrictiva.
Publicidad
Son muchos los oficios tradicionales que se encuentran actualmente en peligro de extinción por las restricciones legales y la falta de relevo generacional. Una de estas profesiones en la de pescador de anguilas, un auténtico arte en riesgo de desaparecer gracias al cual los restaurantes gallegos pueden ofrecer a sus clientes uno de los mayores símbolos de la gastronomía de Galicia.
Jesús Suárez, Suso, es, tal y como él mismo se define, "el último pescador de anguilas del Tambre". Lleva casi cuatro décadas buscando este escurridizo pez con forma de serpiente en las aguas de este río, situado en pleno corazón de la comarca del Barbanza (A Coruña). Y lo hace en la más absoluta soledad.
La suya es una profesión que le encanta. Asegura que le da "paz" y que le hace sentirse "privilegiado", pero cada vez le resulta más difícil vivir de ella.
Muchas cosas han cambiado desde que él se inició en el oficio. Con la contaminación y la falta de caudal cada vez hay menos anguilas en las aguas, por lo que pescarlas es cada año más difícil. Además, la normativa cada vez es muy restrictiva, ya que en los últimos años se han establecido una serie de medidas de control en las capturas para preservar la especie. La Xunta de Galicia permite tan solo el uso de 10 nasas por licencia, y en una zona muy acotada.
Hacerse con este manjar no solo se está volviendo más complicado, sino también menos rentable: las ganancias de Suso dependen de las capturas diarias, que en un buen día pueden reportarle unos 50 euros, a razón de 12 euros el kilo.
Su oficio no es fácil, pero le apasiona, aunque cada vez resulte más duro vivir de él. Espera seguir ejerciéndolo mientras su salud se lo permita. Además, le preocupa si cuando llegue el momento alguien ocupará su lugar o si será, definitivamente, "el último pescador de anguilas del Tambre".
Publicidad