Publicidad
VITORIA | INDEMNIZACIÓN DE 84.000 EUROS
Piden 31 años de cárcel a un ecuatoriano por abusar casi a diario de la nieta de 9 años de su mujer
Durante un año y medio, el hombre, de 54 años, supuestamente abusó sexualmente de la menor. El acusado amenazó e intimidó a la joven para evitar que contara los abusos.
La Fiscalía de Álava ha solicitado una pena de más de 31 años de cárcel, y que indemnice con 84.000 euros, para un hombre que supuestamente abusó sexualmente de la nieta de su mujer, de 9 años, casi todos los días durante un año y medio.
Según el relato del fiscal, el hombre, de 54 años y nacionalidad ecuatoriana, convivía en un piso de Vitoria con su esposa, la hija de ésta y tres nietos menores de edad. Los abusos comenzaron supuestamente en abril de 2008 con una de las nietas de su esposa, de 9 años, y continuaron hasta octubre de 2009. El acusado aprovechaba la ausencia de las mujeres por motivos laborales para engañar a la menor y llevarla a su habitación mientras que resto de los niños permanecía en el salón.
Según el relato de la Fiscalía, el hombre se desnudaba y también desvestía a la niña, al menos de cintura para abajo, y se colocaba encima de ella. Asimismo la besaba, la tocaba por todo el cuerpo y la obligaba a tocarle sus genitales. Además, supuestamente introdujo su pene en la vagina y en la boca de la menor aunque no llegó a penetrarla completamente.
En una ocasión, un hermano de la niña presenció los abusos, pero el acusado se valió de una actitud intimidatoria y amenazante para obligarle a no contar lo ocurrido. El hombre también abusaba de la niña en la zapatería que éste regentaba en la capital alavesa. En estos episodios, en los que no se desnudaban, él se sentaba en una silla y colocaba a la niña encima para después frotarse contra ella.
Durante todo este tiempo el acusado amenazó e intimidó a la menor para evitar que contara los abusos. A finales de octubre de 2009 la madre encontró unas braguitas de la niña, semiescondidas detrás de un mueble y con restos de sangre. Cuando se las enseñó a su hija, ésta se puso muy nerviosa y empezó a llorar, lo que hizo sospechar a la madre, aunque la menor guardó silencio sobre los abusos.
Finalmente y casi un mes después de este hallazgo, la niña comenzó a contar lo ocurrido a su madre, que denunció los hechos. Como consecuencia de estos supuestos abusos, la menor está afectada psicológicamente y ha sido sometida a un seguimiento médico. Además, tanto la madre como el hermano que presenció lo ocurrido han requerido tratamientos psicoterapéuticos.
La Fiscalía pide una pena de 18 años y 9 meses de cárcel por un delito de agresión sexual de carácter continuado, y otra de 12 años y 6 meses de cárcel por abuso sexual continuado, al aplicarle las agravantes de parentesco mixto y abuso de autoridad y confianza. También reclama al acusado 84.000 euros como indemnización por los daños psicológicos causados: 60.000 en el caso de la menor, 12.000 para la madre y otros 12.000 para el hermano de la víctima. El juicio por estos hechos se celebrará la semana que viene en la Audiencia Provincial de Álava.
Publicidad