Polémica por un rodaje porno a plena luz del día en el centro de Madrid

Sin ningún tipo de pudor, dos actrices porno se pasean por un parque céntrico de Madrid, normalmente frecuentado por muchas madres con niños. Mostrando abiertamente los pechos andan lentamente por los jardines hasta que una señora les increpa. Les recrimina lo que considera una actitud intolerable, pero ellas siguen su camino sin inmutarse.

Continúan su camino hasta la Gran Vía, y en pleno Callao, acompañadas por un cámara, se exhiben ante los turistas.

Están grabando una escena porno para una película que, según el Ayuntamiento de Madrid, técnicamente se puede grabar porque no apoyan ningún trípode sobre suelo público.

Sin embargo, su paseo se vuelve sadomasoquista sobre el Puente de Toledo. Escenas en cueros que llaman la atención a los jubilados que caminan por allí.

La productora argumenta que no han hecho daño a nadie y el cuerpo es bello, pero lo cierto es que pueden haber incurrido en un delito contemplado en el Código Penal de exhibicionismo, siempre que hayan grabado delante de menores, y parece difícil que en una ciudad como Madrid ningún menor les haya visto en plena vía pública.