¿Me pongo la tercera dosis si acabo de pasar la COVID? Las dudas que ómicron provoca sobre la vacuna de refuerzo

El verano pasado el debate de la vacuna contra el coronavirus giraba en torno a los efectos secundarios, a si la desarrollada por una farmacéutica era mejor que la otra y al nivel de protección que nos otorgaba ante 'el bicho' así como a partir de cuándo éramos inmunes. De eso parece haber pasado un siglo y ahora el debate se centra en si la tercera dosis o dosis de refuerzo es necesaria y más concretamente, si ante la escalada masiva de contagios con ómicron debo o no ponerme el tercer pinchazo.

Sanidad calcula que el 25% de la población en España se ha contagiado de COVID-19, unos 12 millones de personas desde que comenzó la pandemia. Sin duda ómicron ha pegado un buen acelerón en esta cifra, así pues el Instituto Carlos III calcula que desde el 1 de diciembre hasta el 12 de enero de este año, momento en el que la nueva variante está en su máximo esplendor de transmisibilidad las comunidades han notificado 2.594.758 positivos, un crecimiento del 33% en apenas mes y medio, además se han notificado en el mismo tiempo 51.722 reinfecciones.

En medio de este tsunami de contagios llegaron también las prisas por administrar la dosis de refuerzo de la vacuna contra el Sars-CoV-2 y en este contexto cada vez son más las dudas que surgen: ¿Debo vacunarme si he pasado la enfermedad? ¿Cuánto tengo que esperar para ponerme una tercera dosis? A continuación vamos a intentar responder a estas y otras preguntas.

¿Debo recibir la tercera dosis aunque tenga la COVID-19?

Las autoridades sanitarias recomiendan la tercera dosis incluso para las personas que se han contagiado de coronavirus. En España, la Comisión de Salud Pública en la que participan el Ministerio de Sanidad y las comunidades autónomas decidió extender a todos los mayores de 18 años la administración de una dosis de recuerdo de las vacunas anticovid. Así pues una persona vacunada con Pfizer, Moderna y AstraZeneca recibirá un tercer pinchazo y una inmunizada con Janssen el segundo.

¿Cuándo debo ponerme la tercera dosis?

La dosis de refuerzo puede administrarse transcurridos 5 meses desde la segunda dosis de Pfizer o Moderna. Sin embargo los que inicialmente fueron inmunizados con AstraZeneca o Janssen podrían recibir el recuerdo a partir de los 3 meses de la inyección previa.

¿Y si me he contagiado de coronavirus antes de recibir la tercera dosis?

Las autoridades sanitarias sí recomiendan administrar un refuerzo de la vacuna incluso entre los contagiados, aunque el positivo se haya registrado hace poco tiempo, y tanto si han tenido síntomas como si no.

¿Cuánto tiempo he de esperar hasta que me vuelvan a vacunar?

La recomendación sanitaria es esperar al menos 4 semanas tras el diagnóstico de la infección, una vez que la persona contagiada se encuentre completamente recuperada, tienen que haber transcurrido al menos 3 días desde la desaparición de los síntomas, si los hubiera y haya completado el correspondiente período de aislamiento.

El pasado 29 de diciembre se modificó dicho período de aislamiento. Hasta ese momento era de 10 días, pero desde entonces se ha reducido a 7 días desde el inicio de los síntomas o, en el caso de los asintomáticos, a partir de la toma de la muestra para el test que confirmó el diagnóstico. También deben cumplir una cuarentena de 7 días los no vacunados que hayan tenido contacto estrecho con un positivo.

Eso sí, hay que recordar que, al igual que ocurre con los no infectados, no pueden recibir la dosis de refuerzo, 0,3 mililitros de Pfizer o 0,25 de Moderna, hasta 5 meses después de haber completado la pauta inicial de vacunación con alguna de estas dos vacunas de ARN mensajero o hasta 3 meses después si esa persona fue inmunizada con AstraZeneca o con la monodosis de Janssen.

¿Cómo sé si mis síntomas son por COVID o por la vacuna?

Cuando un recién inmunizado con la dosis de refuerzo tiene dudas sobre si lo que nota son efectos secundarios de la vacuna o síntomas de haberse infectado de covid, nada que no sea un test podrá despejar definitivamente la incertidumbre, pero hay señales, como la tos o la congestión nasal, que pueden hacer pensar en un posible contagio por coronavirus.

Entre los síntomas más habituales de la variante ómicron destacan la tos, la congestión y mucosidad nasal, la fatiga y el dolor de garganta. Por su parte, Los efectos secundarios más comunes de una dosis de refuerzo de las vacunas anticovid, además de la sensación de cansancio y el malestar general, son los siguientes: escalofríos, fiebre no muy alta, dolor de cabeza y, por supuesto, dolor y molestias en el hombro y el brazo donde se ha recibido la inyección.

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