Desde hace meses gran parte de los inmigrantes están llegando a las costas españolas por Canarias. Esto se debe a que desde marzo las ciudades autonómicas de Ceuta y Melilla se encuentran cerradas debido al coronavirus.
Gran parte de los inmigrantes que vienen a nuestro país por patera lo hacen desde Marruecos, y ahora entran a España por otra ruta Atlántica.
La ruta nace en el sur de Marruecos y el Sáhara Occidental, principalmente en estos puertos de salida: Tan Tan, Tarfaya, El Aaiún, Bojador y Dajla.
Desde Dajla hasta Gran Canaria, es de unos 500 kilómetros. Y esa distancia la hacen en barcos poco preparados y muchas veces sin apenas combustible.
Aún así, miles de personas han usado esta ruta. Se calcula que cerca de 17.000 personas en lo que llevamos de año, es casi 10 veces más que el año pasado.
Este jueves se redujo un tercio el número de migrantes hacinados en el puerto de Arguineguín (Canarias) tras 48 horas de alivio en la llegada de embarcaciones y después de la tormenta política provocada por la salida de 227 personas del recinto sin ninguna planificación al cumplirse las 72 horas de retención que marca la ley.
En el puerto de Arguineguín, donde hace solo unos días llegaron a hacinarse cerca de 2.700 personas, albergaba este jueves a unos 1.750 inmigrantes, tras la salida de unos 900 de ellos desde el pasado martes. 200 personas fueron enviadas a un centro de acogida en Las Palmas de Gran Canarias y otro grupo fue enviado a alojamientos turísticos del sur de la isla.
