Profesora impartiendo una clase

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SÍNDROME DE 'BURNOUT'

El 65% de los profesores están 'quemados'

Según Investigadores de la Universidad de Murcia (UMU), el 65% de los profesores de Primaria, Secundaria y Bachillerato sufre el denominado síndrome del 'burnout', que se traduce como estar 'quemado' o 'carbonizado.

Este trastorno supone un agotamiento emocional que se desarrolla como resultado de una relación personal "dura, intensa y frustrante" con alumnos o compañeros.

En concreto, el 12% de los docentes padece el síndrome de forma "evidente", y otro 53% tiene una tendencia o riesgo objetivo de sufrirlo, según los resultados de la investigación desarrollada por el grupo de Personalidad, Evaluación y Tratamiento Psicológico de la UMU tras someter a examen a 95 profesores de estos niveles educativos.

El síndrome de 'burnout', que se traduce literalmente como estar 'quemado' o 'carbonizado, presenta una serie de síntomas inequívocos. Los profesores están agotados emocionalmente, se sienten más fríos, ariscos y cínicos en su relación con los alumnos o el resto de docentes, y no se encuentran realizados en su trabajo, según ha informado a Europa Press el profesor de la Facultad de Psicología de la UMU e investigador principal del grupo, Enrique Javier Garcés.

Los profesionales de la Educación están muy expuestos a este síndrome porque se ven obligados a tratar a mucha gente y establecer relaciones intensas con ellos durante mucho tiempo. De todas formas la incidencia del 'burnout' es semejante en todos los ámbitos laborales, porque son contextos en los que las interacciones son duras, hay una presión diaria y existe una obligación de colaborar y de entenderse con compañeros o superiores.

Con todo, Garcés aclara que es un error identificar este trastorno con el ámbito del trabajo. De hecho, puntualiza que este problema puede surgir en cualquier entorno, como en las relaciones de pareja, entre padres e hijos o en el deporte, por ejemplo.

Los 'quemados' son personas que lo primero que hacen al despertarse es pensar que se encuentran muy mal, a pesar de no haber hecho deporte o ejercicio físico que lo justifique. El desencadenante de este pensamiento recurrente es el simple hecho de saber que van a ver a la persona con la que mantienen esa relación agotadora.

El 'burnout' se desarrolla en varias fases. En primer lugar, el 'quemado' experimenta un agotamiento emocional y una "fatiga" al verse obligado a ver a la persona que le frustra. Posteriormente, piensa en cómo afrontar la situación, al estar obligado a vivir con la persona que tanto le desgasta.

Se produce entonces un fenómeno que se denomina 'despersonalización', cuando el 'carbonizado' intenta defenderse "emocionalmente" de la otra persona estableciendo un distanciamiento con ella. Por ejemplo, quien sufre el síndrome se va a mostrar menos agradable con su pareja; va a tener la relación "justa" con el compañero de trabajo, o va a establecer, incluso, cierta distancia física con ellos.

La tercera y última fase es la que desencadena el síndrome del 'burnout' en toda su extensión y de forma completa. Los psicólogos llaman a esta etapa 'Reducida realización personal', y se produce cuando el 'quemado' empieza a preguntase "qué hace con esa pareja, con ese jefe o con ese deporte".

No hay un perfil claro de personas que pueden sufrir potencialmente este síndrome, pero Garcés afirma que tienen más posibilidad de sufrirlo los perfeccionistas, quienes tienen un peor manejo de la ansiedad, los que manejan mal las emociones o los que son altamente competitivos.

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