Investigación
Una proteína podría ser clave para frenar el cáncer de pulmón
Un estudio llevado a cabo por un grupo de la Universidad de Tulane, en Estados Unidos, ha encontrado una manera de detenerlo.
Publicidad
Una investigación podría conducir al desarrollo de un nuevo fármaco contra el cáncer de pulmón y un tratamiento más personalizado para los casos mortales. La clave, según un grupo de la Universidad de Tulane, en Estados Unidos, estaría en una proteína. Este equipo de trabajo ha encontrado que una conocida proteína supresora de tumores llamada RBM10 puede inhibir el crecimiento de este tipo de cáncer al suprimir la función de c-Myc, que es otra proteína que impulsa el crecimiento y la proliferación de las células tumorales.
Estos investigadores descubrieron que RBM10 se asocia con dos proteínas ribosómicas (RPL5 y RPL11) para desestabilizar c-Myc e impedir la propagación del cáncer de pulmón. "Descubrimos que RBM10 puede apuntar directamente a c-Myc para su degradación y reducir sus efectos cancerígenos al unirse con RPL5 y RPL11", explica uno de los investigadores.
El proceso
Para entender cómo puede funcionar el proceso para detener la progresión del cáncer de pulmón, imaginemos dos fábricas en una célula, cada una de las cuales fabrique piezas para ensamblarlas en nuevas maquinarias de proteínas; c-Myc desempeña un papel habitual en este proceso de producción de proteínas y los humanos no podrían vivir sin él.
Más Noticias
- Primer informe de víctimas mortales de la DANA: Más de un centenar tiene 70 o más años y 9 son menores
- Color, viento y sostenibilidad: miles de cometas y 220 drones iluminarán Corralejo
- Uxía Carral, sobre el papel de las grandes plataformas en la desinformación: "Se basan en algoritmos que se mueven por la viralización"
La investigación también ha descubierto que una forma mutante de RBM10 que se encuentra a menudo en los cánceres de pulmón pierde la capacidad de suprimir c-Myc, no se une a las proteínas ribosómicas RPL5 y RPL11 y, finalmente, promueve el crecimiento tumoral en lugar de suprimirlo. «RBM10 es una proteína importante que puede suprimir las células cancerosas, pero cuando un cáncer quiere desarrollarse, mutará RBM10 y bloqueará esa función», señala uno de los miembros del equipo, que añade que podrán diseñar una molécula que se dirija al mutante, ya que se trata de una estructura especial que no existe en el tejido normal.
Publicidad