Las preguntas sin respuesta del asesinato de Borja Villacís: este dato podría decirnos que el crimen estaba planificado

El asesinato del hermano de Begoña Villacís está envuelto en una aritmética de misterio que todavía no tiene respuesta. ¿Por qué lo mataron? ¿Estaba todo planificado? ¿Cómo es posible que sucediese en un sitio visible y a plena luz del día? En la Newsletter de Antena 3 Noticias vamos a tratar de aclarar esta y otras cuestiones.

A plena luz del día, tres personas paran un coche gris a tan solo cuatro metros de una carretera bastante transitada. Dos personas que iban dentro de él, salen y se esconden detrás de un árbol. Iban vestidos de negro. La mujer, con un vestido más llamativo, empieza a conducir el coche. El hermano de la que fue vicealcaldesa de Madrid acaba de ser asesinado. Se encuentra en una cuneta que del distrito de El Pardo-Fuencarral

La investigación permanece en estos momentos bajo secreto de sumario. Los policías continúan trabajando para resolver varias incógnitas que todavía se ocultan tras el caso. Por el momento, ya han sido detenidos esos tres individuos que estaban en el coche desde el que dispararon a Borja Villacís. Este jueves se ha confirmado que uno de ellos ya ha sido puesto en libertad según informaciones del Instituto Armado.

Un operativo liderado por la Guardia Civil y la Policía Nacional pudo dar con los dos autores materiales del asesinato en Toledo. Uno de ellos es el hijo de la mujer previamente detenida en Plaza Elíptica que conducía el vehículo. De la otra persona se está investigando la posible relación con el tiroteo.

¿Encuentro fatal?

En un principio, los agentes del Grupo V de Homicidios de la Jefatura Superior de Policía de Madrid tenían la hipótesis de que un ajuste de cuentas era el motivo del crimen. Sin embargo, permanecen todavía abiertas otras líneas de investigación. Una de ellas, y la que está cobrando en estos momento más fuerza, es que previamente hubo un encuentro entre los agresores y Borja Villacís que tuvo un desenlace fatal.

Fuentes de la investigación han precisado a la agencia de noticias EFE que los cuatro habían quedado en las inmediaciones del restaurante Lar de Domingo. Este sitio se encuentra muy cerca del lugar en el que tuvo lugar el disparo sobre las 12:30 horas de la mañana del martes, alrededor del kilómetro 6 de la carretera M-612.

¿El motivo de la reunión? Siempre citando las mismas informaciones, todo apunta a que habrían quedado para resolver algún asunto. Un dato que está siendo esencial es que Kevin Pastor, presunto autor material del crimen, acudió a la cita armado. Esto podría indicarnos que el suceso estaba previamente planificado, algo que todavía no ha sido confirmado.

Villacís había sido acompañado también por otra persona, que resultó herida y se trasladó él solo hasta el Hospital Fundación Jiménez Díaz, en el que ingresó en estado grave.

La radiografía del perfil del agresor y la víctima

El hermano de la exvicealcaldesa recibió varios tiros, presuntamente con un rifle de caza, en el pecho y en la cabeza. El relato del testigo va a ser imprescindible para conocer el móvil exacto del asesinato y que vínculos previos existía con los agresores. La escena fue vista también por más personas que caminaban por la zona. Su testimonio también será clave para resolver las incógnitas que siguen en el aire.

Kevin Pastor tenía una orden de busca y captura por la policía desde hace años. Se le acusa de varios delitos relacionados con el narcotráfico. En Francia pasaba largas temporadas trabajando con una documentación falsa. Pero lo hacía a medias, porque también se escondía en la casa de su padre, que está en el barrio madrileño de Carabanchel. Otro dato importante del perfil del autor del crimen es su pertenencia a un clan vinculado al narcotráfico en Bargas, Toledo. Su madre, María José Estopa, también está en el punto de mira. Antena 3 Noticias se ha desplazado hasta el localidad toledana de Bargas, en la que vivía la progenitora del presunto autor material del crimen. Los vecinos cuentan que era bastante conflictiva. Les insultaba e incluso les amenazaba de muerte.

La víctima, de 41 años, fue integrante presuntamente del grupo de extrema derecha Ultra Sur. En el año 2004 fue condenado a 6 meses de cárcel por varios delitos de odio tras lanzar insultos racistas a una joven en el Metro de Madrid y agredir a dos personas que intentaron defenderla.

Además, Borja Villacís estaba imputado desde 2018 en una causa fruto de la operación Águila-Frazen de la Guardia Civil contra varias organizaciones relacionadas contra el narcotráfico.

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