El rapero mallorquín Valtonyc, que tiene hasta este jueves para entrar en la cárcel condenado a 3,5 años por enaltecimiento del terrorismo, injurias a la Corona y amenazas, ha asegurado que "desobedecer es legítimo y obligación ante este estado fascista". "No se lo voy a poner tan fácil", ha afirmado José Miguel Arenas Beltrán, Valtonyc, en un mensaje en su cuenta de Twitter minutos antes de las 15.00 horas. Desde entonces, se encuentra desaparecido, e incluso se especula con que podría haberse fugado al extranjero.
Entre este miércoles y este jueves hay convocadas concentraciones de apoyo a Valtonyc en Madrid, Barcelona, Zaragoza, Villarreal, Girona, Alicante y Castellón, según han difundido sus grupos de apoyo a través de redes sociales. En una de ellas, se han quemado imágenes del Rey Felipe VI.
La defensa del cantante ha presentado una petición ante el Tribunal Europeo de Derechos Humanos de Estrasburgo para que suspenda la orden de ingreso en prisión mientras resuelve un recurso, que está ultimando, en el que pide la anulación de la condena por vulneración de los derechos de libertad de expresión y creación.
Varias entidades, incluida la Asociación Unificada de Guardias Civiles, han denunciado a Valtonyc por animar recientemente desde un escenario a matar "un puto guardia civil" y a "ponerle una puta bomba al fiscal". El joven fue condenado por la Audiencia Nacional en febrero de 2017 a 3 años y medio de cárcel por tres delitos (enaltecimiento del terrorismo, calumnias e injurias graves a la Corona y amenazas no condicionales en sus canciones), si bien la pena a la que se le sentenció por cada una no sobrepasó los 2 años de prisión.
Un año después, el Supremo ratificó la condena al rechazar que la actuación de Valtonyc estuviese amparada por la libertad de expresión y la creación artística, sino que sus canciones incluían expresiones de apoyo y alabanza a las organizaciones terroristas GRAPO, ETA, y a algunos de sus miembros, así como frases contra la Corona y el presidente del Círculo Balear, Jorge Campos, a quien se dirigieron las amenazas.
En su sentencia, los magistrados de la Audiencia Nacional tuvieron en cuenta que las canciones de Valtonyc "tienen un indudable carácter laudatorio" hacia ETA y el GRAPO y que comportaban "una alabanza, no ya de los objetivos políticos sino de los medios violentos empleados por la citadas organizaciones terroristas y por sus miembros y contienen una incitación a su reiteración".