Volcán de La Palma
Roberto Brasero explica el recorrido de las coladas de lava y la ceniza: "Ya ocupa más de 1.300 hectáreas"
Las coladas de lava siguen avanzando debido a la erupción del volcán de La Palma, también hay que tener en cuenta los efectos de la ceniza. Roberto Brasero ha explicado el recorrido de las coladas de lava y cómo han avanzado durante los últimos días.
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Uno de los factores que más preocupan durante estos días en La Palma son los efectos de la ceniza y especialmente de los avances de las lenguas de lava. Roberto Brasero ha querido explicar cuál es el recorrido de la ceniza y qué efectos puede tener en el terreno y en los habitantes.
Las coladas de lava y la ceniza se pueden ver desde los satélites del 'programa Copernicus', que es un mecanismo que utiliza Protección Civil para evaluar la situación en la zona.
Desde el satélite se puede apreciar gran parte de la ceniza, que ocupa ya más de 1.300 hectáreas. Las coladas de lava de los primeros días avanzaron muy rápidamente por el territorio y varios días después se generó una segunda colada y que fue ensanchando y agrandando la primera.
El recorrido de las coladas de lava
A medida que iba avanzando afectaba a más áreas. Desde el satélite hemos podido observar como las dos coladas de lava se vuelven a reactivar, tanto la principal como la secundaria, esta lava es más caliente y avanza más rápida al ser más fluida. Estas coladas están provocando muchos problemas especialmente en la zona de Todoque, donde ha colapsado el campanario de la iglesia.
Por la mañana, la UME ha puesto en funcionamiento el dron y se han podido ver otras consecuencias otras coladas, la buena noticia es que la colada sur ha podido ser frenada por el cerro del cementerio y este ha quedado a salvo de momento. Eso sí, otras muchas casas se verán afectadas en las próximas horas por las coladas de lava.
La lava sigue destruyendo viviendas
La lengua de lava se ha tragado cientos de viviendas a lo largo de estos últimos días y sigue siendo una amenaza. Miles de familias en La Palma viven pendientes de su recorrido.
El balance de pérdidas aún no está cerrado, pero se calcula que la lava ha afectado a cerca de 500 construcciones que figuran en el catastro. De ellas, 450 se dan por destruidas.
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