Manchas de orina, de sangre y hasta de Betadine. Así están las sabanas que han llegado a urgencias en el Hospital Ramon y cajal. Vienen de la lavandería pero están sucias.
Mar Coloma, portavoz del sindicato MATS, denuncia que se encuentran sábanas "con restos de heces y pis" hasta algunas con moho.
Con esta lencería las auxiliares no pueden cambiar las sabanas a los pacientes. Llegan en mal estado y ademas insuficiente para todas las camas. Denuncian que reciben unos cuatrocientos juegos para mil camas.
La Consejería de Sanidad defiende la calidad del servicio. La Comunidad va a revisar el contrato con la empresa que finaliza en noviembre. Van a cambiar las condiciones para mejorar la lencería de los hospitales madrileños.
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