Sanitarios del hospital de Vall d’Hebron explican cómo las vacunas han salvado a las UCI de otro colapso

La sexta ola de coronavirus marcada por la aparición de la variante ómicron ha provocado un brusco aumento de casos en todo el mundo.

"Hemos tenido un poquito menos de ingresos que en ola anteriores y, además, con una entrada mucha más lenta a las unidades de críticos", comenta María José Abadías, subdirectora asistencial de Hospital Vall d'Hebron.

El 40% de las camas están ocupadas por pacientes covid

Los contagios durante esta sexta ola de coronavirus han provocado el ingreso de muchas personas, aunque, a diferencia de las demás, las Unidades de Cuidados Intensivos (UCI) no han contemplado la presión que se observaba anteriormente. El 40% de las camas del Hospital Vall d'Hebron están ocupadas por pacientes covid, "la UCI alrededor de un 20% son ómicron, yo diría que en planta alrededor del 80%", afirma Benito Almirante, Jefe de enfermedades infecciosas del Hospital Vall d’Hebron. Almirante también ha explicado que gracias a la vacuna, el ingreso en UCI es "prácticamente imposible".

"Situación de mucha presión asistencial"

A pesar de que los pacientes que ingresan no presentan una sintomatología grave, en los hospitales se detecta bastante "tensión" para poder atender todos los ingresos que van sucediendo, lo que provoca “una situación de mucha presión asistencial”, explica Ricard Ferrer, jefe de Medicina Intensiva del Hospital Vall d’Hebron.

Esta situación genera que los sanitarios estén al límite y que tengan que actualizar prácticamente a diario la organización de los hospitales, manteniendo reuniones semanales en las que analizar la situación para establecer el mejor método de trabajo.

"Este cansancio viene por muchas horas de trabajo y por mucha incertidumbre", explica Pilar Girón, supervisora de Enfermería UCI del Hospital Vall d’Hebron.

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