El juicio contra Sergio Morate que se celebra en la Audiencia Provincial de Cuenca para dilucidar si es culpable de los asesinatos de Marina Okarinska y Laura del Hoyo se ha reanudado este martes.
Eliseo S., el cuarto testigo de la mañana en pasar por la sala de vistas, ha declarado que la noche anterior a producirse los asesinatos se encontró a un grupo de amigos en Palomera, entre ellos Morate, con quienes mantuvo una conversación. En la charla que mantenían, hablaron de temas como la violencia de género. Además, Eliseo S., que es licenciado en Derecho, ha revelado que Morate se interesó en la noche antes de los asesinatos sobre aspectos como los procesos de extradición y de prescripción de delitos.
En todo caso, ha dejado claro que se trataba de una conversación entre cuatro amigos, donde él "se interesó un poco más en esos temas". Tras esa conversación, ha manifestado que fueron a dar una vuelta en uno de los coches de Morate por los caminos aledaños al pueblo, algo que era habitual.
Eliseo S., quien tenía una amistad desde pequeño con Morate por veranear ambos en la localidad de Palomera --donde aparecieron los cuerpos--, ha dicho que tanto él como el acusado conocían bien todos los parajes cercanos al pueblo.
El amigo que alojó a Morate en Rumanía no comparece a declarar como testigo
Istvan H., quien alojó a Rumanía a Sergio Morate poco después de cometerse los asesinatos, no ha comparecido en su país de origen a prestar declaración como testigo tal y como estaba acordado, ya que según ha explicado un funcionario rumano por videoconferencia "está trabajando en Alemania".
Tampoco han comparecido ni la mujer ni el hermano de Istvan, a quienes también se les esperaba. Por la relevancia de su testimonio, el Ministerio Fiscal ha pedido que se le haga declarar por la fuerza, si bien ha solicitado que en caso de no poder obligarle a comparecer, se pueda integrar su última declaración en sede judicial como prueba testifical.
Sofía, la mujer de Istvan, no ha comparecido alegando que tenía un hijo pequeño; mientras que el hermano de Istvan, Gabriel, está en paradero desconocido. Ante esta situación, los letrados de las acusaciones particulares y el Ministerio Fiscal --que han considerado este extremo una "obstrucción a la justicia"-- han pedido que se pueda localizar para llevar a los juzgados rumanos a los tres testigos.