Estafa

Una señora de 72 años, estafada por un hombre en redes sociales: "Era muy apuesto y atento"

La mujer de 72 años, a quien su hijo le hizo redes sociales para combatir la soledad, relata cómo perdió los ahorros de toda su vida al dárselos a un hombre que conoció por internet. Ahora se siente estafada, manipulada y engañada.

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Luisa, a quien le hemos puesto un nombre ficticio porque quiere permanecer en el anonimato denuncia que ha perdido los ahorros de toda una vida. Concretamente, 30.000 euros, que asegura le prestó a un hombre que conoció por internet. Su hijo la alertó, pero ella cayó en sus redes y aun hoy se lamenta por ello: "Me siento engañada, manipulada, estafada, que me haya pasado esto a mi edad es lo peor".

Todo empezó hace unos meses. Esta mujer, de 72 años, hace 20 que es viuda y su hijo le propuso abrirle un perfil en una red social para que conociera a alguien. "Vi a un hombre que me pareció muy apuesto, empezamos a hablar y al final nos dimos el WhatsApp", explica.

Relata que al principio era muy adulador y atento: "Era muy cariñoso, me mandaba flores virtuales, poesía, yo me enamoré ". A partir de ahí, empieza la rocambolesca historia.

Luisa cuenta que no podían conocerse en persona porque él le decía que era ingeniero naval y estaba en alta mar siempre viajando.

Así fue la estafa

La primera vez que ella recuerda que le pidió dinero fue para una tarjeta telefónica. Al parecer, a él se le había terminado el saldo de una tarjeta telefónica y necesitaba que ella se la cargara para poder seguir hablando porque él tenía dólares, pero no podía hacerlo. ¿El coste de la tarjeta? 50 euros.

Al poco tiempo le pidió lo mismo pero esta vez le dijo que el importe era de 150 euros . Ella accedió: "Me dijo que me lo devolvería" . Sin embargo, Luisa narra que cada vez le pedía más dinero con diferentes excusas. "Cariño estoy en Japón y no me dejan entrar, me piden una tasa de 10.000 euros, por favor, hazme una transferencia, te prometo que te lo devolveré". Posteriormente, él le explicó que estaba retenido en un país y que estaba siendo golpeado y amenazado de muerte si no pagaba cierta cantidad. "Yo pensé: pero pobre, cómo va a estar así", y volvió a prestarle dinero.

Mientras, él le enviaba fotos de la mansión que tenía en Estados Unidos y le había propuesto comprar una casa en Cataluña "yo me enamoré, qué planes de futuro tan maravillosos que tiene".

Pero ahora soy consenciente de que él se aprovechó de mi sensibilidad, no se cómo he sido tan tonta. De hecho no creo que ni siquiera fuera el mismo que el de las fotos", y asegura que nunca le devolvió el dinero prestado.

Amenazas para seguir timando

Cuenta que cuando su hijo se enteró, le dijo que tenía que frenar las situación, pero ella hacía caso omiso. Hasta que un día abrió los ojos y decidió no hacer ninguna trasferencia más y afirma que empezó su calvario: "Amenazaba que si no le mandaba el dinero que iban a venir unas personas a por mí y a por mi hijo".

Denunció su caso a los Mossos d'Esquadra, pero de momento no hay rastro del supuesto estafador. "Si alguien se mete en una red social y le piden dinero, que no se fíen, que no hagan como hice yo". Desde entones, cuenta está en tratamiento psicológico.

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