La séptima víctima del accidente de autobús acababa de visitar a su pareja en la cárcel

La novena pasajera del autobús que en la Nochebuena se precipitó al río Lérez venía de visitar a su pareja en la cárcel de Monterroso. Mari Luz Álvarez lo conoció en el centro penitenciario de Teixeiro, de donde salió en 2021. Estuvo varias veces en prisión, cumpliendo condena por distintos delitos. Ahora, residía en Vigo.

Con la recuperación del sexto cuerpo sin vida, y los dos supervivientes, el operativo de búsqueda se daba por finalizado el domingo por la tarde. Parecía que no existía novena pasajera hasta que el lunes por la mañana, el hijo de la superviviente, que ya se encuentra en planta en un hospital de Pontevedra, alertó a la Guardia Civil de que su madre iba acompañada. También lo hicieron desde el centro penitenciario de Monterroso, donde tenían registrada la visita de Mari Luz.

La mujer se acercó a la cárcel para visitar a su pareja en la Nochebuena. La idea era que saliese del centro y pudiesen emprender una vida juntos en libertad. El hombre, que para finalizar su condena había sido trasladado al Centro de Inserción Social (CIS) de Instituciones Penitenciarias en Vigo, había vuelto hace poco a Monterroso, y la rutina carcelaria entre ambos era ya una constante.

El trágico accidente deja siete víctimas mortales y dos supervivientes. Entre ellos, la mujer que acompañaba a Mari Luz, y que fue su hijo quien pudo denunciar la desaparición de la novena pasajera. Una grúa ha sacado ya el autobús del agua en una maniobra rápida. El izado ha durado al rededor de cinco minutos y para él ha hecho falta un dispositivo que ha reunido 300 toneladas encima del puente.

La Guardia Civil investiga si la mujer mató a su marido y luego se suicidó tras el hallazgo de los cadáveres en Pantoja, Toledo