A primera hora muchos padres dejaban a sus niños en el colegio sin tener claro cómo iba a afectarles la jornada de huelga: "Viene al cole, pero no sé si van a hacer huelga en su clase o no", dice una de las madres.
La protesta en la enseñanza madrileña se extiende por primera vez a Infantil y Primaria, aunque dos de los cinco sindicatos mayoritarios del sector no secundan el paro en estos ciclos. Las clases en los colegios han estado casi llenas. En Secundaria, donde los alumnos también están convocados a la huelga, la imagen es casi la opuesta. El director de un instituto lo explica así: "En alumnos sí que hemos notado un seguimiento de la huelga mucho mayor".
Para los estudiantes que este año se juegan su futuro universitario, el conflicto empieza a convertirse en una seria preocupación. Una de las alumnas nos lo cuenta así: "Quiero hacer un grado que necesita mucha nota y necesito dar clases".
Los sindicatos sitúan el seguimiento del paro en primaria en la mitad de la plantilla y en Secundaria lo elevan casi a un 70%. En los institutos, la comunidad lo reduce a un 30 y en los colegios aún más, al 12%. Ésta es la sexta jornada de protesta en la que los convocantes exigen sentarse a negociar. Para la comunidad de Madrid, el aumento de horas lectivas no justifica estas movilizaciones.
