El sindicato de Policía denuncia que están desbordados: "Más de 10.000 inmigrantes llegarán a Canarias hasta fin de año"

La llegada de inmigrantes a Canarias supera ya los 20.000. El 25% de esas llegadas se han producido en los últimos 11 días, lo que se traduce en 5.244 personas que viajaban en cayuco. Este repunte del mes de octubre ha dejado a todos los servicios de emergencia y policiales desbordados.

El sindicato de la Policía, JUPOL, calcula que llegarán más de 10.000 inmigrantes a las costas canarias hasta final de año, porque aseguran que así lo acreditan "informes de Inteligencia". Los agentes policiales denuncian, a través de un informe de la Jupol, que "sigue faltando personal, material y un protocolo que garantice a los agentes que pueden trabajar con unas condiciones mínimas de seguridad.

Dice este sindicato que a pesar del incremento en la llegada de cayucos, ni el Gobierno de España ni la Dirección General de la Policía han implementado medidas que ayuden a paliar la escasez de personal y la saturación de los servicios policiales, que llevan a cabo el trabajo en condiciones inhumanas, con jornadas maratonianas y con una importante escasez de medios materiales".

Como ejemplo, hablan de su experiencia en El Hierro: "A la isla están llegando diariamente cayucos con más de 200 inmigrantes y tan solo hay siete agentes de la Policía Nacional desplazados para atenderlos. Además, a esta situación se suma el estado de saturación que se vive en los CATE (centros de atención temporal a extranjeros) operativos en Canarias, que se encuentran ya completamente desbordados y difícilmente podrán soportar la llegada masiva de más inmigrantes".

JUPOL pide, además, que se dote con urgencia de equipos de protección individual a los agentes que trabajan en los puntos de recepción o atención a quienes desembarcan de los cayucos, porque sus condiciones laborales actuales "ponen en riesgo su salud y la de sus familias".

Además, prosiguen en la nota que "venimos solicitando de forma reiterada que se depuren todas las responsabilidades de cualquier índole, denunciando si es necesario toda infracción de las normas de prevención de riesgos laborales de aquellos que, estando legalmente obligados, no faciliten los medios necesarios para que los policías desempeñen su actividad con las medidas de seguridad e higiene adecuadas".

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