Tres jabalíes se cuelan en el CIFP de Imaxe e Son de A Coruña durante las clases

Es viernes. Es 10 de noviembre. En A Coruña llueve y los estudiantes acuden a sus centros como un día más. También los alumnos del CIFP de Imaxe e Son de A Coruña. Y para los del complejo educativo de Someso, con quienes comparten recinto. Ellos, y los trabajadores del centro, no se imaginan, a primera hora de la mañana, la visita que iban a recibir en sus instalaciones. Una sorpresa que se encontraron nada más acceder al recinto.

"Llegamos sobre las 8:30, como siempre, y mientras aparcábamos ya los vimos, eran tres jabalíes". Lo cuenta Luisa Romanes, alumna de la Escuela de Imagen y Sonido. Pero el revuelo comenzó algo después, "en torno a las 10:30". Cómo entraron es un misterio. Personal del centro piensa que podrían haber accedido por una puerta lateral, porque la entrada principal del centro se cierra durante la noche.

La Policía Local llegó bien temprano, tan pronto como recibió el aviso. A los agentes se unieron, poco después, los técnicos de Medio Ambiente, que trataban de capturar a los animales que "corrían por todos lados", comentan los alumnos. Los estudiantes no pudieron salir al recreo ni pasear por el recinto durante un rato largo. Había que facilitar las labores de los técnicos de Medio Ambiente y evitar asustar a los animales, que podrían intentar huir y salir a la vía pública, lo que habría puesto en peligro a viandantes y conductores del centro de la ciudad.

"La verdad es que nos dieron pena porque los estaban persiguiendo para cogerlos, pero realmente no nos asustamos", cuenta Luisa. "Fue más una sorpresa", como cuenta Sandra Seoane, otra alumna del ciclo de Sonido. Ella, al igual que otros compañeros, reaccionó "sacando el teléfono móvil" para captar la curiosa imagen del día, "porque era la primera vez que veía tan de cerca a un jabalí", explica. Finalmente, los tres jabalíes, una madre y sus dos crías, han sido sedados y capturados.

"Cuando los cogieron, no sabíamos si los habían sedado o sacrificado, así que hablamos con las autoridades y nos dijeron que los iban a sacrificar", cuenta. Algo con lo que no están de acuerdo algunos estudiantes "porque debería de haber un protocolo diferente para esto", sentencia Luisa.

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