Un informe asegura que las comunidades de vecinos son un territorio hostil para buena parte de los españoles. Tanto es así que el 14% de los propietarios asegura que no soporta a sus vecinos, y cuando llega la hora de ser el presidente de la comunidad más de la mitad reconoce que eso le provoca ansiedad y que estarían más felices si no se vieran obligados a asumir tan problemático cargo.
Los problemas más conflictivos entre vecinos son la falta de cuidado con las instalaciones comunes (43%), el impago de las cuotas de la comunidad (40%) y la falta de acuerdo a la hora de tomar decisiones conjuntas (36%).
Otro de los aspectos que más preocupa es el pago de la cuota mensual de la comunidad, que en el 83% de los casos asciende a más de 60 euros al mes. A este respecto, el estudio señala que 6 de cada 10 madrileños manifiestan tener algún vecino moroso en la actualidad.
Las reuniones de vecinos parecen no ser suficiente para resolver estos conflictos. Así el estudio revela que el 66% de los propietarios reclama una mayor participación en la gestión de su comunidad. A pesar de que prácticamente la totalidad de las comunidades de vecinos (97%) realizan este tipo reuniones, las dificultades para su organización hacen que 7 de cada 10 comunidades madrileñas las realicen solo una o dos veces al año.
Asimismo, más de la mitad de las comunidades realizan un seguimiento de los temas vecinales mediante cartas o circulares (58%) y tablones de anuncios (49%), plataformas sumamente rudimentarias que no se ajustan al modo de vida real actual y que impiden la inmediatez en las comunicaciones.