Desde el nacimiento del cementerio de neumáticos de Seseña, los
problemas legales han rodeado este espacio. En 2002, el paisaje del polígono de Seseña se volvió redondo y
negro, y detrás de ello está la empresa Disfilt.
El responsable del cementerio de neumáticos está en paradero desconocido
El consejero de Medio Ambiente de la Comunidad de Madrid, Jaime González Taboada, ha asegurado que el responsable del cementerio de neumáticos está en paradero desconocido y ha recibido multas por importe de 600.000 euros.
Desde
entonces el gestor de la empresa acumula más de 450.000 euros en sanciones
impagadas y cerca de 20 juicios pendientes. Una batalla legal mientras se van
acumulando las cerca de 90.000 toneladas de neumáticos en una superficie similar a
la de diez campos de fútbol. Entre las argucias legales, un 70% del
vertedero está en Toledo y un 30 en Madrid.
Las comunidades de Madrid
y Castilla-La Mancha ya habían puesto en marcha planes para acabar con esta
situación. El portavoz de Ecologistas
en Acción de Castilla-La Mancha, Miguel Ángel Hernández, ha lamentado el
incendio originado, indicando que
desde su organización llevan "muchos años" reclamando a las
administraciones de Madrid y Castilla-La Mancha su eliminación, al tiempo que
ha recordado que la empresa que gestionaba este vertedero, Disfilt SA,
"nunca cumplió su cometido de reciclar las ruedas, pese a que cobraba por ello".
Si no es
debidamente tratado, los residuos de un neumático pueden durar hasta siete millones
de años.