EN PRISIÓN DESDE 2013
El joven, vecino de Alicante, fue detenido cuando transportaba 450 gramos de cocaína. Ahora, tras permanecer cinco años en una cárcel de Kuala Lumpur, ha sido condenado a pena de muerte.
Un vecino de Benilloba, en Alicante, ha sido condenado a pena de muerte en Malasia tras permanecer cinco años en una cárcel de Kuala Lumpur por transportar 450 gramos de cocaína.
Su familia, desesperada, pide implicación para que se le conmute la pena y no acabe en la horca. Han tenido que pedir un préstamo para pagar abogados y traductores, pero no han conseguido nada. Víctor lleva en prisión desde el año 2013 tras entrar al país con 450 gramos de cocaína. Su hermana dice que lo hizo para saldar una deuda.
Todos los meses su familia le envía 150 euros a prisión para poder ducharse, comprar artículos de aseo, comida y para poder llamar a España.
Se trata de Víctor, un hombre boliviano de 30 años que pasó su juventud en España, donde sigue su familia. Sin embargo él fue expulsado y más tarde detenido en Malasia, donde el tráfico de drogas se castiga con la pena capital.
No es el primer español al que el tráfico de drogas le ha costado la libertad. Cientos de españoles se hacinan en cárceles tercermundistas como algunas de sudamérica.
Isamar es una española que ha cumplido ya parte de su condena. 18 años de cárcel por cargar con 15 kilos de cocaína. "Si te metes en un problema te pueden hacer cualquier cosa", asegura.
Los traficantes saben que en la desesperación económica son muchos los que pican el anzuelo y se lo juegan todo por dinero y se aprovechan de ello.