El tour virtual del denominado 'piso de los horrores' ha reproducido a la Sala que juzga a Antonio Ortiz las zonas donde presuntamente se perpetraron dos de las agresiones sexuales y ha mostrado las numerosas marcas de prueba de la Policía Científica.
La grabación se ha emitido con señal abierta a los medios y ante un Ortiz que ha permanecido inerte como una "roca", tal y como lo definieron ayer algunos abogados que representan a las acusaciones particulares y populares.
En la grabación, realizada por la Policía Científica, se ha podido ver el colchón dónde se habrían cometido los abusos y el baño donde presuntamente Ortiz lavó a dos de sus presuntas víctimas para borrar las huellas.
A lo largo del piso hay marcas de referencias de la Policía sobre huellas halladas. Muchas de ellas están en la cocina y en la ducha. También hay marcas de las pruebas en un mueble donde una de las niñas vomitó tras la agresión.
También se han visto las puertas blancas situadas en el garaje de la vivienda, unas puertas que fueros descritas por una de las niñas agredidas en este piso de Ciudad Lineal. Esta menor llegó a hacer un croquis con el plano del piso.
La reproducción virtual se realiza con una cámara que realiza múltiples fotografías a la vez y luego se reproducen en tres dimensiones. Con ello, se evita a las víctimas tener que volver al escenario de las agresiones.
El considerado el pederasta de Ciudad Lineal ha encarado con semblante tranquilo y serio la segunda sesión del juicio que se celebra por agredir sexualmente a cuatro menores entre septiembre de 2013 y agosto de 2014.
Ataviado con una sudadera marcada de color verde oscuro y un pantalón de chándal negro, el acusado ha entrado engrilletado a la Sala, custodiado por dos policías. Tras ser liberado de los grilletes, se ha sentado tranquilo en la silla que le sitúa al frente de los magistrados de la Sección Séptima de la Audiencia Provincial de Madrid.
Hoy la sesión ha sido en parte a puerta cerrada. Ortiz ha escuchado el testimonio de dos de las niñas: la testigo protegido número 4 (6 años de origen chino) y 5 (7 años de origen dominicano). La primera es la menor que más resultó afectada por la agresión. De hecho, uno de los abogados pide por ella que se le impute una tentativa de homicidio, ya que su vida corrió peligro.
Ayer ya estuvo presente durante el visionado de las grabaciones del testimonio de otras dos niñas, que le identificaron en las ruedas de reconocimiento sin género de dudas. En el caso de las de hoy, también le señalaron en las ruedas.
Tras el visionado de su exploración, se ha procedido a realizar una reconstrucción virtual del piso de Santa Virgilia. En el denominado 'piso de los horrores', Ortiz habría agredido a dos de las víctimas. Una de ellas estuvo hospitalizada diez días y requirió de intervención quirúrgica por las lesiones.
En esta vivienda desocupada los agentes de la Policía Científica hallaron varios vestigios incriminatorios como una huella palmar en el plástico que cubría un colchón. Aquí también se halló sangre de una de las víctimas y esperma del procesado.
Ayer, el procesado se negó a declarar y manifestó que no iba a responder a ninguna de las preguntas. Esta última afirmación la hizo esbozando una sonrisa en la cara. Tras sus palabras, retomó su actitud seria.