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VOLCARON DOS VAGONES

Un error técnico, humano o de procedimiento, entre las posibilidades que barajan los investigadores tras el accidente

Las autoridades han abierto una investigación y han comenzado a analizar los datos de la caja negra del tren.

El siniestrado ha sido un tren de pasajeros de la compañía Comboios de Portugal (CP) que hacía la ruta Vigo-Oporto. El accidente ferroviario ha tenido lugar en la entrada de la estación en el centro de la localidad de O Porriño, a escasos 200 metros. El tren chocó inicialmente contra la base del puente de la Nacional 120 en O Porriño y terminó impactando contra una torre de luz.

Ahora se investiga que provocó el primer golpe. ADIF ha confirmado que el convoy no tenía parada en O Porriño, debía circular por vía libre, sin desvíos a 80 kilómetros por hora y sin embargo lo hizo por el carril derecho.

Un posible exceso de velocidad, un fallo en la señalización por obras en la vía o un error humano. Lo cierto es que el tren llegaba a la estación tras sobrepasar dos cambios de aguja, el último muy cercano al puente dónde según algunos testigos se habría producido un frenazo brusco.

La alcaldesa del municipio se había quejado recientemente en Madrid de la velocidad con la que pasaban los trenes en medio del pueblo.

Otra posibilidad que barajan los investigadores es el fallo mecánico de la locomotora, ya que tenía 40 años de antiguedad. Algo que ha descartado la empresa portuguesa

El presidente de Comboios de Portugal, Manuel Queiró, ha afirmado que no hay indicios de que el accidente sea atribuible a un fallo humano o material. "Nada indica que el accidente fuera por un fallo humano o del material", ha explicado Queiró en el lugar del siniestro.

También se baraja la posibilidad de que hubiera algún objeto en la vía, ya que se estaban realizando trabajos en ese tramo. El ministro de Justicia en funciones, que ha asumido la cartera de Fomento, Rafael Catalá, ha señalado que en la vía principal es donde se están realizando estos trabajos en los enclavamientos, y esta alteración, que entra en la normalidad, obliga a una necesaria reducción de la velocidad, ha señalado.

Ha asegurado que el tren fue revisado el jueves y cumplía "todas las garantías". En todo caso, ha pedido no aventurar las causas, puesto que ya están en marcha las pesquisas para averiguar si hubo un error técnico, humano o de procedimiento.

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