Una fuerte tormenta ha sacudido durante la tarde de este martes la localidad de Valladolid. La tromba de agua ha anegado calles y ha obligado a la Policía Local a cortar los túneles de San Isidro, Vadillos y Labradores y también las calles Esgueva, Platerías o Juan García Hortelano ya que se habían convertido en auténticos ríos.
El 112 ha gestionado 150 avisos entre las 21.20 y las 22.30 horas a causa de las incidencias relacionadas con la lluvia, de los cuales 132 han sido en en la capital vallisoletana, según han informado fuentes del Centro de Emergencias 112 de Castilla y León.
Vehículos atrapados y aplastados por ramas, desprendimientos de tejados e inundaciones en garajes, aparcamientos, bajos y calles han sido los principales destrozos de una fuerte tromba que también ha estado acompañada de vientos superiores a los 50 kilómetros por hora.
Como ha informado Bomberos de Valladolid, hasta el momento no se ha registrado ningún herido ni altercado de gravedad, al margen de estos percances provocados por la lluvia y el viento, que también ha derrumbado árboles y farolas en la urbe.
Debido a estas lluvias, la Aemet activó el nivel de aviso naranja en la provincia de Valladolid, donde se han registrado 30 litros por metro cuadrado en una hora, especialmente en la capital, mientras que en el resto de la Comunidad se han mantenido los avisos amarillos.
En menos de una hora han caído 34 litros por metro cuadrado, el cuerpo de bomberos insta a mantener la calma al estar "desbordados ante las múltiples llamadas".
Varias personas han tenido que abandonar sus vehículos después de ver como sus coches se quedaban atrapados en mitad de las balsas de agua que se han formado. Otra situación crítica se ha vivido en el aparcamiento subterráneo de la Plaza Mayor,recientemente inaugurado, en el que llegaron a permitir la salida de vehículos por la rampa de la calle Manzana al quedar prácticamente anegado.
