Elisabeth Muñoz tiene 19 años y vive en Lleida. Todavía no tiene carnet de conducir, pero eso no le impidió evitar una tragedia este martes. El conductor del autobús en el que viajaba se quedó inconsciente y la joven se lanzó a coger el volante hasta que logró detener el vehículo, salvando así la vida del resto de pasajeros.
El autobús llegó a circular unos 350 metros sin control y en sentido contrario desde la Plaça Font y Quer hasta el campo de fútbol de Pardinyes en Lleida. Una vez pasó todo, el conductor fue trasladado al Hospital Universitario Arnau de Vilanova y, afortunadamente, no hay que lamentar ningún herido.
"La valentía de una pasajera, que ha sujetado el volante hasta que el vehículo se ha detenido, ha evitado que ninguna persona haya resultado herida. Únicamente se han producido daños materiales en la rueda delantera del vehículo", cuenta la Policía en redes sociales.
"Estábamos a punto de chocar"
"Estábamos a punto de chocar. Estábamos en una vía de una sola dirección y nos pusimos en contra dirección", cuenta la joven a Antena 3. En ese momento, fue cuando Elisabeth se lanzó a coger el mando del autobús y "de un volantazo" evitó que se chocaran contra una isleta.
Para llevar a cabo su heroica acción, tuvo que retirar la cabeza y la pierna del conductor, todavía inconsciente encima del volante. "Como pude le quité el pie del acelerador para ir más lentos", sigue.
Sobre el resto de pasajeros, Elisabeth cuenta que algunos entraron en pánico, llegando a golpear las ventanas para avisar a otros conductores de lo que estaba ocurriendo en su autobús.
Gracias a los avisos, consiguieron ayuda. "En ese momento un conductor para, sale y se pone enfrente de nuestro autobús. Me empezó a dar indicaciones sobre cómo meter la neutra, ya que las marchas son en botones, y ya él con el freno de mano paró definitivamente".
Elisabeth solo lleva 4 prácticas de conducir, pero asegura que "evitar todo lo que podría haber pasado" fue mejor opción "que quedarse quieto y entrar en pánico".