La Guardia Civil ha abierto una investigación para tratar de esclarecer las circunstancias de la muerte violenta y por el momento los investigadores manejan varias hipótesis, entre la que cobra más fuerza la violencia de género, sin que se hayan descartado otras como la de un posible robo.
La Guardia Civil no ha facilitado ningún dato de la vinculación entre las dos personas fallecidas, de mediana edad, y si residían en Totana o en algún otro municipio murciano.
La pareja hallada muerta este miércoles en el interior de un vehículo en Totana había roto. Igualmente, no habían antecedentes de violencia de género ni agresiones que la mujer hubiera denunciado con anterioridad, aunque se trata, finalmente, de un caso de violencia machista.
El alcalde de Totana, Andrés García, ha confirmado que ninguna de las dos víctimas era de Totana, sino que la mujer era natural de Lorca y el hombre de Mazarrón.
En concreto, explica que el paraje en el que ha sido encontrado el coche con los cadáveres, en un terreno cerca de un polígono industrial y de la autovía, es un lugar "bastante transitado", sobre todo ahora, ya que una empresa cercana se encuentra en plena temporada de la uva.
El alcalde ha asegurado que, con toda probabilidad, el Ayuntamiento decretará este viernes un minuto de silencio a las puertas del Consistorio, al igual que suele suceder en este tipo de casos, y ha mostrado su repulsa a la "lacra" de la violencia machista. "Todos tenemos que hacer lo posible para tratar de atajarlo de una vez", ha aseverado.
Fue una patrulla del Servicio de Prevención de Seguridad Ciudadana quien encontró los cuerpos de esta pareja, ambos de nacionalidad española y de mediana edad, al levantar sospechas el vehículo, que se encontraba estacionado en un camino próximo a un polígono industrial de una zona rural en los extrarradios del municipio.
Los cuerpos de la pareja tienen signos de violencia, ya que presentan impactos por arma de fuego. Se sospecha que el hombre mató presuntamente a su pareja sentimental y, con posterioridad, se quitó la vida.
