DDHH
La víctima de la violación en Sant Boi desvela ante el juez cómo se sucedieron los hechos
La joven ha declarado ante la Audiencia de Barcelona cómo fue secuestrada en un maletero, agredida en un descampado y tirada tras la violación
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Acudir a la discoteca Be Disco del polígono industrial de Molins de Rei (Barcelona) cambió su vida. Tenía 21 años y prácticamente sin poder reaccionar, fueviolada por un grupo de tres chicos que, por turnos, la agredieron física y mentalmente. Este jueves 11 de noviembre, ya con 24 años, la víctima ha contado ante la Audiencia de Barcelona lo sucedido.
Todo ocurrió una noche de mayo de 2018, cuando esta chica, tras beber y drogarse en el baño de la discoteca comenzó a discutir con su amiga. En ese punto optó por quedarse con conocidos y fue entonces cuando "tengo flashes de que estaba fumando, yendo a las naves, cuando paró un coche con unos chicos que me dijeron si estaba sola que dónde iba y me pidieron un mechero". Ahí cambió todo.
En ese punto, los ocupantes del vehículo la "cogieron del pelo" y "arrastraron", la “metieron dentro del maletero" y pese a los golpes que, tal y como ha narrado al juez, empezó a dar desde dentro. Pero no logró nada. "No sé cuánto duró el trayecto, pero cuando abrí me cogieron, me tiraron al suelo, me bajaron las medias y me levantaron el vestido". En ese momento, según ha contado, había cinco chicos.
El lugar, apartado. "Había tierra, un descampado, árboles, de lejos vi a un matrimonio y chillé, pero no pararon". Nadie la hizo caso. Tampoco sus agresores, que, pese a sus amenazas de morderles –de hecho, llegó a morder a uno– siguieron violando a esta joven de 21 años.
"Me decían que era una puta, que lo ponía difícil"
"Estaban los tres encima de mí y me decían que era una puta, que lo ponía difícil, como que otras no ponían resistencia". Ella sí. Ella lo intentó, sin embargo, no obtuvo ningún resultado. Eran mayoría y mucho más fuertes. "Yo me movía y me cogían fuerte de los brazos, del cuello y de la cara. Recuerdo que uno chillaba y decía 'nos la va a liar'. Y discutían".
En ese punto "abrieron la puerta y me dejaron allí, me quedé llorando y fui a la estación". Sin embargo, "nadie me quería ayudar". Finalmente pudo volver a casa y denunciar esta agresión sexual por las que se reclaman penas de más de 40 años de cárcel para los tres acusados de violar por turnos a la joven.
Penas de 43 y 46 años de prisión
Además, según el fiscal, uno de los acusados hizo fotografías a la joven mientras la violaban e incluso las difundió con otros amigos por un grupo de WhatsApp. Por este motivo éste se enfrenta a una pena de 46 años.
Ella, por su parte, se enfrenta a los recuerdos de este acto y a las consecuencias que ha tenido en su vida. Y es que, tal y como ha subrayado, "ha cambiado por completo. No quiero salir a la calle, me ducho más veces rascándome fuerte porque me da asco".
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