Cádiz
VIDEO: Kiko 'El Cabra' impidió a pedradas que un autobús con ancianos que evitaban un brote de Covid entrase en La Línea
El tripulante de la narcolancha que mató a dos guardias civiles impidió a pedradas que un autobús con ancianos que salían de una residencia donde había un brote de Covid entrase en la localidad de La Línea.
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Kiko 'El Cabra' es quien pilotaba la narcolancha que mató a dos agentes de la Guardia Civil en Barbate (Cádiz). Ocurrió diez días después de que uno de sus amigos muriera al chocar contra una patrullera de la Guardia Civil en Sanlúcar de Barrameda.
Fue detenido en marzo 2020, el año de la pandemia de coronavirus. Él, junto a un grupo de vecinos de La Línea de la Concepción, apedrearon a autobús con 28 ancianos que eran trasladados a un edificio de la localidad para evitar los contagios de un brote de coronavirus en su residencia en Alcalá del Valle. Lanzaron piedras y artefactos incendiarios y quemaron contenedores, recoge 'EFE'.
'El Cabra' -que empezó "desde muy joven" en las redes del tráfico de hachís- cuenta con antecedentes por resistencia, desobediencia y blanqueo de capitales. La última vez que fue detenido fue hace un año, en febrero de 2023, cuando lo descubrieron con 40 kilos de hachís.
Detenidos por la muerte de la Guardia Civil
Además de los dos agentes de la Guardia Civil que fallecieron en el suceso, hay otros dos heridos después de que la narcolancha embistiera la embarcación a gran velocidad. Uno de los heridos está grave, pero fuera de peligro.
Los dos agentes fallecidos han sido reconocidos con la concesión a título póstumo la Cruz de Oro de la Orden del Mérito de la Guardia Civil.
Los ocho detenidos por la muerte de dos agentes de la Guardia Civil el pasado viernes, pasan hoy lunes a disposición judicial en los Juzgados de Barbate. De ellos, seis arrestados son la tripulación de la narcolancha -entre ellos Kiko 'El Cabra'-. Los otros dos detenidos son dos hombres que fueron a buscarles en un vehículo en Sotogrande, al que llegaron huyendo tras embestir a los agentes y cuentan con antecedentes por tráfico de drogas y contrabando.
A los seis tripulantes, la Guardia Civil les imputa dos delitos de homicidio y lesiones graves a agentes de la autoridad, por los otros dos agentes heridos en el suceso del pasado viernes. Respecto a los dos detenidos por ir a recoger en coche a los tripulantes, se les imputa delitos de encubrimiento y de resistencia grave a agente de la autoridad.
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