Críticas contra grandes compañías como Google o Facebook por el bombardeo publicitario

Las búsquedas de la mujer sobre bebés en internet quedaron registradas, la publicidad de ropa de niños o artículos sobre cómo dormir durante toda la noche eran continuos.

El bombardeo siguió incluso después del parto, pero su hijo nació sin vida. Las marcas siguieron con los anuncios de bebés hasta que publicó una carta en redes sociales para decir basta: "Por favor, empresas de tecnología, se lo imploro, si son lo suficientemente inteligentes para darse cuenta de que he dado a luz, entonces seguramente son lo suficientemente inteligentes para darse cuenta de que mi bebé murió" .

Las tecnológicas ya le han contestado, mejorarán sus algoritmos en casos sensibles como el suyo y esto tiene una explicación asegura Nacho Pinedo de CEO ISDI, "cada vez que mostramos interés por algo de lo que está ocurriendo en el entorno digital estamos dejando un rastro ".