Dos de los condenados a su salida del Supremo

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POR ATENTAR CONTRA LOS DERECHOS DE AUTOR

Suecia ratifica las condenas a los creadores de The Pirate Bay

El Tribunal Supremo de Suecia ha obviado la propuesta de revisar la sentencia que obliga a los dueños de The Pirate Bay a seguir cumpliendo condena. Se corroboran las condenas de entre 4 y 10 meses de cárcel a Carl Lundström, Peter Sunde y Fredrik Neij.

Los condenados habían solicitado que se obtuviera un dictamen preliminar del Tribunal de Justicia de la Unión Europea, pero el Supremo sueco señaló que no hay dudas acerca de la interpretación de la sentencia de la Corte de Apelación de Svea de noviembre de 2010. Del mismo modo, deberán indemnizar con 46 millones de coronas suecas, algo menos de 5 millones de euros; a la industria audiovisual.

Tras conocerse el fallo, la web de The Pirate Bay ha cambiado su habitual logotipo de un barco pirata por un puño apretado negro y ha colgado un comunicado sobre la sentencia a sus "amigos y hermanos de sangre". "Puede sonar peor de lo que es. Puesto que ninguno de ellos vive ya en Suecia, no necesitarán ir a la cárcel. Son tan libres hoy como lo eran ayer", dice el comunicado.

La Agencia Antipirata Sueca, que representa a la industria, calificó el fallo de "punto de ruptura sobre la larga discusión de los derechos de autor en Internet", ya que en su opinión se ha clarificado que "todos los que colaboran en el delito, incluso los que proporcionan la conexión, deben asumir su responsabilidad". Henrik Pontén, jurista de este lobby, anunció que la Agencia Antipirata actuará en los juzgados contra los cerca de 150 portales que en Suecia se dedican al intercambio ilegal de archivos.

Una sentencia con un largo recorrido histórico
Los problemas de The Pirate Bay con la justicia sueca comenzaron en 2005, cuando la Fiscalía abrió un caso en contra del portal, nacido un año antes en Estocolmo. La policía sueca detuvo en mayo de 2006 a tres de los acusados en una redada en la que se confiscaron todos los servidores y los cuatro responsables fueron acusados formalmente en enero de 2008, aunque el juicio no comenzó hasta un año después.

La popularidad del caso, aumentada por la aprobación de una ley contra el intercambio ilegal de archivos en Internet, situó al movimiento contra la propiedad intelectual en primera línea y llevó al Partido Pirata sueco a lograr un diputado en Bruselas.

Pero varios factores, como la fallida compra de TPB por una compañía de software y distintos reveses legales provocaron una progresiva decadencia, plasmada en el cierre en junio de 2010 de la Agencia Pirata y el pobre resultado obtenido por el Partido Pirata en las elecciones legislativas de ese año, con apenas el 0,65 por ciento de los votos.

TPB continúa siendo no obstante el portal sueco más grande y uno de los más populares en todo el mundo

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