El fuerte incremento de las ventas de iPhone disparó las ganancias de Apple entre enero y marzo de 2011, su segundo trimestre fiscal, según anunció este jueves la empresa de Silicon Valley que se vio superada por la demanda de sus tabletas iPad.
Apple registró un beneficio neto de 5.987 millones de dólares durante los tres primeros meses del año, lo que supuso un 94,7 por ciento más que durante el mismo período de 2010, con unos ingresos de 24.667 millones de dólares, un 82,7 por ciento más en términos interanuales.
"Estamos echando fuego por todos los cilindros", dijo en un comunicado Steve Jobs, consejero delegado de Apple, en un comunicado en el que afirmó que la compañía seguirá "innovando en todos los frentes a lo largo de lo que queda de año". Las cuentas de Apple superaron las expectativas del mercado con un beneficio por acción de 6,40 dólares frente a las estimaciones de los analistas de 5,38 dólares, un récord para su segundo trimestre fiscal aunque las cifras fueron menos boyantes que las logradas entre octubre y diciembre.
En los últimos meses de 2010, Apple ingresó 26.741 millones de dólares y logró un beneficio de 6.004 millones de dólares. El gran protagonista del arranque de 2011 para Apple fue su teléfono iPhone de los que despachó 18,65 millones de unidades en todo el mundo, un 113 por ciento más que en el mismo período de 2010. Un crecimiento de las ventas debidas en gran parte al final del monopolio de la distribución de ese dispositivo en EEUU que tenía desde 2007 AT&T y a partir de febrero se puso también a disposición de los clientes de Verizon, así como el éxito del producto en China.
Apple comercializó 3,76 millones de ordenadores Macs, o un 28 por ciento más, y 9,02 millones de iPods, lo que representó una caída de las ventas interanuales de un 17 por ciento. Un dato que, no obstante, fue mejor de lo esperado por la empresa, según confesó su director financiero, Peter Oppenheimer.
Una de las principales decepciones fue el rendimiento de su tableta informática iPad que causó sensación en 2010 después de su salida al mercado en abril y que celebró el lanzamiento de su segunda generación el pasado 11 de marzo en EEUU, y el día 25 internacionalmente. Entre enero y el 26 de marzo, día en el que Apple cerró su balance trimestral, se vendieron 4,69 millones de iPad.
La cifra fue sensiblemente inferior a las previsiones de los expertos que calculaban que la comercialización del dispositivo rondaría los siete millones de unidades, cantidad parecida a la vendida entre octubre y diciembre. La expectativa creada por la llegada de un nuevo iPad afectó a la venta de los modelos antiguos y la incapacidad de Apple para hacer frente a la demanda de iPad 2 limitaron las ventas de la tableta informática. "La demanda es asombrosa", confesó Tom Cook, jefe de operaciones de Apple en la rueda de prensa posterior al anuncio de los resultados trimestrales.
"Estamos sorprendidos de que aún a día de hoy vamos muy por detrás en la producción aunque confío en que podamos incrementar la oferta en lo que queda de trimestre", manifestó Cook ante la demora de entre 2 y 3 semanas existente sobre pedidos actuales de iPad 2. "Hemos vendido todos los iPad 2 que hemos hecho. No sé cuándo podremos alcanzar la demanda", puntualizó el ejecutivo en previsión de que el iPad 2 debutará en los próximos días en 13 países más.
Apple se solidarizó con la situación que atraviesa Japón tras el terremoto y el tsunami sufrido en marzo y la consecuente crisis nuclear, una desgracia que también afectó a sus cuentas. La compañía adelantó que el desastre nipón supondrá una mengua en sus ingresos para el próximo trimestre de 200 millones de dólares si bien su cadena de producción no se verá afectada, al menos entre abril y junio.
"Estamos trabajando contrarreloj con planes de contingencia y seguimos al lado de nuestros socios japoneses de largo tiempo. Tengo que advertir que la situación es impredecible y que podría haber escasez de suministro más allá del trimestre actual. No tenemos claro qué impacto tendrá esto", apuntó Cook.