LÍNEAS DE EXPRESIÓN
Aparición de arrugas con la edad: Causas y prevención
En este artículo, hablaremos sobre la aparición de las arrugas con la edad, los tipos que existen y qué puedes hacer para retrasar su aparición. Aunque contra la genética no se puede luchar, sí se puede llevar un estilo de vida que prevenga la aparición prematura de ciertas líneas de expresión.
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Las arrugas son una parte natural del proceso de envejecimiento, por lo que su aparición la experimentamos todos en algún momento de nuestra vida. A medida que envejecemos, nuestra piel pierde colágeno y elasticidad y se vuelve más delgada y seca, lo que, sumado al efecto de la gravedad, provoca la formación de arrugas de forma lenta y progresiva.
Estos surcos de la piel son uno de los principales motivos por los que los españoles acuden a centros de estética, pues cada vez existen más tratamientos que pueden suavizarlas y alargar el aspecto joven del rostro unos años más.
Arrugas frontales, arrugas del entrecejo, patas de gallo, arrugas en el párpado inferior, en las mejillas, surco nasogeniano, líneas de marioneta, arrugas en las comisuras de los labios, código de barras o líneas del cuello horizontales, son algunos de los tipos de arrugas que existen y que recogen en este artículo de la Dra. Sandra Planella, oftalmóloga especializada en cirugía oculoplástica y estética oculofacial, para el Centro de Oftalmología Barraquer.
¿Por qué aparecen?
Si bien las arrugas son una parte inevitable del proceso de envejecimiento, hay muchos factores, aparte de la edad, que pueden acelerar su aparición:
- Genética:Si tus padres o abuelos tuvieron arrugas de jóvenes, es posible que tú también las tengas a una pronta edad.
- Exposición solar: La radiación ultravioleta (UV) del sol daña el colágeno y la elastina en la piel, lo que lleva a la formación de arrugas.
- Tabaco: Fumar puede acelerar el proceso de envejecimiento de la piel.
- Nutrición: La falta de nutrientes como las vitaminas A, C y E, el selenio o el zinc, puede afectar la salud de la piel.
¿A qué edad comenzamos a tener arrugas?
Según el artículo publicado en la página web de Barraquer, las primeras líneas de expresión suelen aparecen en la franja de edad que va de los 25 a los 30 años. Estas pueden adelantarse o atrasarse según lo expresiva o risueña que sea la persona en cuestión, "pues estas primeras arrugas surgen debido a la actividad muscular y los gestos repetitivos, como fruncir el ceño o sonreír mucho".
Normalmente, las primeras arrugas aparecen en el contorno de los ojos, la frente y alrededor de los labios. "Cuando estas arrugas dinámicas aparecen, es el momento ideal para realizar tratamientos preventivos", avisa la Dra. Planella.
A partir de los 40 años, aparecen lo que la experta llama "arrugas gravitatorias", como consecuencia "del proceso natural de envejecimiento por la disminución del tejido adiposo, la degeneración vascular y la atrofia ósea". Estas son de aspecto más marcado y suelen ir acompañadas de deshidratación de la piel, pérdida de luminosidad y de tono.
Llegados a los 50, aparecen las arrugas que siempre están presentes, gesticules con el rostro o lo tengas relajado. "Estas arrugas estáticas están provocadas por la fatiga de las estructuras que constituyen la piel, que pierde volumen de tejido, colágeno y elastina, volviéndose visiblemente más fina y flácida".
Cómo prevenir las arrugas
Aunque la aparición de las arrugas no se puede evitar, hay medidas que puedes tomar para retrasar su aparición:
- Protegerse del sol: Usa protector solar y evita la exposición al sol durante las 12 del mediodía y las 4 de la tarde.
- No fumar: El tabaco envejecerá tu piel mucho más rápido, así que deja el tabaco y mejora tu salud en general.
- Nutrición adecuada: Mantén una dieta saludables y equilibrada, en la que no falten los nutrientes mencionados anteriormente.
- Hidratación: Bebe suficiente agua al día y usa cremas hidratantes para mantener la piel suave y tersa.
- Cuidado de la piel: Pregunta en tu farmacia más cercana por los productos que pueden ayudar a reducir la aparición de arrugas, como aquellos sérums o cremas hidratantes que contengan retinol, vitamina C o ácido hialurónico.
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