¿Cómo afecta tu skincare a tu estado de ánimo?

Después de una larga y estresante jornada laboral, llegamos a nuestro hogar emocionalmente exhaustos por los numerosos contratiempos y devenires que nos ha deparado nuestro día. Un charco pisado, una mala palabra entonada o la ausencia de nuestro compañero favorito en la mesa de al lado de la oficina, pueden ser algunos de los motivos por los que tu estado anímico puede alterarse y venirse abajo.

No obstante, llegamos a casa,echamos la llave a la puerta, llenamos la bañera con agua caliente y comenzamos nuestro momento de autocuidado. Entonces, todos los problemas desaparecen y por un instante, solo estáis tú y ese espejo en todo el baño. Nada más alrededor. Nada más en tu cabeza. Solo relajación y atención al cuidado de uno mismo. Cuando terminas, todo aquello que hacía ruido en el interior de tu cabeza, tras llegar a casa, ya no está.

No, los problemas no se han solucionado por arte de magia. De hecho, siguen ahí. Sin embargo, después de unos minutos de autocuidado, todo se ve desde otra perspectiva. De esta forma, ¿podemos decir que el cuidado de la piel y la realización de un skincare puede ayudarnos y mejorar nuestro estado anímico?

Bienestar emocional y psicológica gracias al autocuidado

Realizar una rutina de cuidado de la piel tiene numerosos beneficios. No solo estéticamente, también en nuestro estado anímico. El simple hecho de dedicar tiempo a uno mismo y a nuestro cuidado puede afectar en los niveles de bienestar físico, emocional y psicológico. Además, muchos de los cosméticos y productos de belleza que utilizamos, suelen tener propiedades e ingredientes que producen una sensación placentera.

Por ejemplo, uno de los ingredientes cosméticos que nos produce esta sensación y nos ayuda a mejorar nuestro estado anímico y reducir el cansancio y estrés, es el extracto de fermento de alteromonas. Se trata de un grupo de bacterias marinas que se encuentra en los océanos y que se logra a través de la fermentación.

Más allá de su intensa hidratación, su acción protectora y su capacidad de fortalecer, entre otras funciones, destaca por su capacidad antioxidante y antiinflamatoria que nos produce una sensación de nutrición y relajación que actúa directamente sobre las terminaciones nerviosas cutáneas y afecta a nuestro estado anímico, ya que el cerebro responde segregando neurotransmisores como la serotonina, conocida como "la hormona de la felicidad".

Acariciar es sinónimo de cuidar

Cuando nos ponemos frente al espejo, el estrés se reduce a causa de que centramos nuestra atención en una única cosa. Pero si este gesto lo convertimos en una rutina y, por tanto, en un ritual, esto puede generarnos numerosos beneficios en nuestra salud física y emocional y subirnos el estado de ánimo. Sobre todo, cuando nos aplicamos los cosméticos con masajes y caricias con las manos en el rostro. No existe una mejor representación de la palabra "cuidar".

Las caricias pueden ayudar a potenciar nuestra autoestima y equilibrar el sistema nervioso. Además, la musculatura de la cara está relacionada con nuestras emociones, por lo que cuando sentimos algo y no lo gestionamos, rápidamente se muestra en nuestro rostro. No obstante, a través de las caricias y los masajes faciales podemos liberar esa tensión muscular que producirán cambios positivos en nuestro estado anímico. Por este motivo, invertir en el cuidado de la piel, cosméticos y herramientas para tu skincare, es una de las mejores decisiones que tomarás para ti misma.

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