CORRIGE TUS HÁBITOS
Te estás aplicando mal el acondicionador y estos son los motivos
A pesar de ser un producto bastante común en nuestra rutina de belleza, su empleo equivocado puede traer más problemas que ventajas.
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Acondicionadores en spray o en crema, aceites, mascarillas, champús hidratantes... La oferta de productos para tener un cabello bonito y sedoso es tan amplia que a menudo no sabemos por dónde empezar, qué debemos aplicar y cuándo hacerlo para lucir una melena bonita sin abusar de productos que puedan engrasarla o estropearla.
Según datos de Pantene, el 44% de las mujeres usa acondicionador después de cada lavado, frente a un 16% que no lo ha usado nunca y un 11% que lo utiliza esporádicamente. Pese a que las marcas de productos para el cabello ponen el grito en el cielo ante estas cifras, lo cierto es que muchas mujeres –sobre todo aquellas que tienen el cabello corto, joven o bien hidratado y sedoso sin necesidad de aportes extra– no necesitan aplicarlo (cuando es necesario, el propio cabello lo pide a gritos). Si eres de las que necesitas emplear acondicionador para desenredar e hidratar tu cabello después de cada lavado, te contamos cómo aplicarlo –y cuál es el adecuado para ti– y te señalamos cuáles son los errores más frecuentes que cometes.
Escoges un acondicionador cualquiera
Lo mejor es que te pongas en manos de un profesional para que te indique qué tipo de producto es el más adecuado para ti. Tal vez te convenga un acondicionador en crema, o te recomienden uno en spray, que probablemente tengas que combinar con el uso regular de mascarillas o aceites (cuidado con ellos, pues engrasan mucho el cabello) para mantener la hidratación. Escoge uno adecuado a tu tipo de cabello (graso, seco, rizado, encrespado, lacio...), que potencie sus cualidades y aporte brillo y textura a tu melena.
Lo aplicas en el cuero cabelludo
Uno de los motivos por los que muchas personas se quejan de que el acondicionador les engrasa el cabello es, precisamente, que no están empleando el producto adecuado a su tipo de pelo o que lo aplican mal. Es importante ponerlo solo en las puntas, suavemente, evitando el contacto con el cuero cabelludo y, sobre todo, distribuirlo homogéneamente para que actúe en todo el cabello.
No lo dejas actuar unos minutos
Aunque vayamos con prisas y nuestra intención sea ducharnos en un plis plas para salir disparadas de casa, es importante guardar unos minutos para dejar actuar el acondicionador. Si aclaramos el pelo inmediatamente, este no hará su efecto y será prácticamente como si no lo hubiésemos aplicado.
Usas demasiado o demasiado poco
En función de la longitud y características de la melena aplicaremos el acondicionador del tamaño de una almendra o, como máximo, de una nuez. Si nos quedamos cortas, el efecto no se notará, y si nos pasamos es probable que el pelo quede grasiento y apelmazado. Lo ideal es ir probando hasta dar con la cantidad perfecta y no movernos de ahí.
No aclaras bien el cabello (antes y después)
El acondicionador debe aplicarse siempre sobre el cabello limpio y aclarado, de modo que tenemos que ser concienzudas a la hora de lavarlo (siempre con un champú de calidad que aporte hidratación, adecuado para nuestro tipo de cabello) y de enjuagarlo por completo. Una vez el cabello está listo, lo aplicamos en la punta, masajeando suavemente sin dar tirones, y lo dejamos actuar unos minutos. Después de poner el acondicionador, es importante enjuagar debidamente para evitar que queden restos.
Secas demasiado el cabello con la toalla
De nada sirve gastarnos un dineral en un buen acondicionador si no lo dejamos actuar correctamente. Si, una vez aplicado, nos frotamos el cabello con la toalla, lo que conseguiremos es anular sus efectos y encresparlo de nuevo, de modo que lo mejor es envolverlo en una toalla y presionarlo ligeramente (como hacen en la peluquería), siempre sin frotar. Es preferible que quedé un poco más húmedo y tengamos que secarlo durante más rato, aunque lo idea es siempre, si la ocasión lo permite, dejar que se seque al aire libre.
Abusar de secador y planchas
No es algo que tenga que ver directamente con el acondicionador, pero lo cierto es que si abusamos del uso de planchas y de secador (especialmente si secamos con aire muy caliente), nuestro cabello estará mucho más reseco y estropeado, lo que significa que al acondicionador le costará más penetrar. Si usas planchas de ondular, intenta que su uso sea esporádico y emplea rulos o trenzas, y si las utilizas para alisar, tal vez con un buen secado tengas suficiente.
No le das una ayuda de vez en cuando
No hay normas establecidas, pero en general el uso de champú y acondicionador no es suficiente para mantener un cabello brillante e hidratado. La mayoría de personas, especialmente con melenas largas, necesitará un plus de hidratación en función del tipo de cabello. Tal vez sea una vez a la semana, o una vez cada dos, mediante mascarillas hidratantes, caseras o aceites esenciales, pero un aporte extra de hidratación siempre va a ayudar a nuestro acondicionador a cumplir su función.
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