Hay vida más allá de la zanahoria…
Esto es lo que debes comer para ir bronceándote de forma natural
El verano está a la vuelta de la esquina y te apetecería lucir una piel más tostada que la blanca reluciente que tienes ahora, sin pasar por rayos V ni aplicarte cremas auto bronceadoras. ¿Es posible?
Publicidad
Lo es, a través de la alimentación. El secreto de un bronceado restá en el incremento de la producción de melanina, pero esto no se hace de la noche a la mañana, lleva su tiempo, por lo que si quieres lucir bronceado para tus vacaciones de verano ahora es un buen momento para ponerse a ello.
Primero hay una regla básica en cualquier consejo de belleza: hidrátate bien. Bebe la suficiente cantidad de líquido al día (no te guíes tanto por los dos litros de agua que es lo que suele decirse) pero vaya, ingiere suficiente agua, infusiones, etc. Además, no descuides tu crema hidratante o aceites hidratantes dos veces al día, mañana y noche. Esto hará que tu piel esté mejor preparada para ese bronceado que quieres conseguir.
También, exfóliate de 1 a 2 veces por semana, para deshacerte de las pieles muertas: esto es fundamental porque cuando tu piel vaya cogiendo color lo hará sobre las células vivas, no las muertas, por lo que tu bronceado durará más.
Y ahora, veamos lo que puedes poner en el plato y que ayudará a tu objetivo: los alimentos ricos en betacarotenos y vitamina C, entre otras, estimulan la producción de melanina. Grosso modo esto se traduciría en consumir muchas frutas y verduras. Alimentos que contienen betacarotenos son las verduras y frutas de color amarillo y naranja: albaricoque, mango, níspero, melón de cantalupo, naranja, calabaza, boniato…
También ayudan las fresas, los arándanos, la sandía (que además, ayudará en la hidratación), la papaya… Otros que también contienen betacarotenos son las ya famosas zanahorias, el tomate… También, las verduras de hoja verde (muchas de ellas las puedes tomar en ensaladas fresquitas): espinacas, lechuga, brécol, acelgas…
La vitamina E te ayudará a reducir el envejecimiento de la piel y puedes encontrarla en el aguacate, en cereales integrales, en frutos secos y en nuestro exquisito aceite de oliva (mejor, si es virgen extra, por supuesto). La vitamina D tampoco está de más y la puedes encontrar en el pescado azul.
No hay que olvidar que, si te expones al sol, debes ponerte el protector solar adecuado (mejor, cuanto más alto su índice de foto protección). En la alimentación también puedes encontrar aliados para evitar las anti estéticas manchas solares que además, salen más fácilmente según pasan los años: todos los alimentos ricos en vitamina A protegen la piel del daño celular, puesto que esta vitamina interviene en el sistema inmune y en la formación y mantenimiento de las células de la piel. La encontrarás en lácteos, en carnes (ternera, pollo, pavo)…
Incrementa su consumo antes del verano y así tu piel llegará preparada para el sol.
Publicidad