PIEL SIN IMPERFECCIONES
Granos en el cuerpo: los 3 pasos a seguir para eliminarlos
Los granos en el cuerpo son un incordio para personas de todas las edades y tipos de piel, pero, ¿sabías que con tres sencillos pasos puedes conseguir una piel más limpia y sin imperfecciones? Te los explicamos.
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Aparecen en los momentos menos esperados, y no solo en el rostro. Los granos corporales, como el acné en la espalda o la foliculitis en los muslos, son una molestia tanto por lo antiestéticos que son, como por el dolor que producen. Aunque suelen asociarse con la adolescencia, estos molestos granitos afectan a personas de todas las edades y tipos de piel. La buena noticia es que existen métodos sencillos y efectivos para mantener la piel libre de estas imperfecciones.
Desde exfoliaciones hasta una doble limpieza adecuada, los especialistas en cuidado corporal tienen claras las estrategias que ayudan a reducir el acné corporal y a mantener una piel suave y saludable. Tan solo hay que tener en cuenta los siguientes tres pasos:
1. Exfoliación en seco para una piel más suave
Eliminar los granos en el cuerpo comienza con una buena exfoliación en seco. Este paso ayuda a retirar las células muertas y mejorar la circulación. Bella Hurtado, directora dermocosmética de Aromatherapy Associates, recomienda el uso de un cepillo de cerdas naturales antes de la ducha. "Este tipo de exfoliación no solo limpia impurezas superficiales, sino que también elimina células muertas, estimula la circulación y mantiene la piel tonificada", explica Hurtado.
Además, la exfoliación en seco reduce la acumulación de sebo, lo que previene la obstrucción de los poros, una de las causas principales de los granos en zonas como la espalda o los muslos. Sin embargo, Hurtado insiste en que este proceso debe hacerse solo una o dos veces a la semana para evitar irritaciones.
2. Limpieza con aceites: "la grasa se limpia con grasa"
Un segundo truco fundamental para eliminar el acné corporal es la limpieza profunda usando aceites. Raquel González, cosmetóloga y directora técnica de Perricone MD, sostiene que "la grasa, como mejor se limpia, es con grasa", ya que los aceites limpiadores actúan como imanes para atraer y disolver las impurezas de la piel. Al aplicar un limpiador oleoso sobre la piel seca y masajearlo, se logra descomponer el exceso de grasa sin necesidad de frotar en exceso, lo cual ayuda a evitar posibles irritaciones. Este paso es ideal después de exfoliar y debe aclararse con agua tibia o retirar con una toalla húmeda para lograr una limpieza profunda.
3. Limpieza doble con exfoliación suave
Para completar el proceso de limpieza, los expertos recomiendan una segunda limpieza con un gel a base de agua. "La piel acumula polvo y otras impurezas a lo largo del día que se eliminan fácilmente con un limpiador en gel", comenta Mireia Fernández, directora dermocosmética de Omorovicza.
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Además, para quienes buscan un tratamiento más completo, existen exfoliantes en polvo que ofrecen una acción dual: exfoliación física y química. Lara González, cosmetóloga en Byoode, sugiere usar exfoliantes en polvo como el Adzuki and Ragi Fantasy, formulado con polvo de arroz para la exfoliación física y ácidos suaves como la gluconolactona para eliminar impurezas más profundas sin causar irritación.
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